«Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla…»

BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / “El hombre es una multitud solitaria de gente, que busca la presencia física de los demás para imaginarse que todos estamos juntos” (Carmen Martín Gaite). La frase de la escritora salmantina interpela en torno al valor de la unidad en lo esencial en una comunidad. Siempre tuve  clara la idea de que de esta crisis, mejor dicho, de estas crisis, en plural, los únicos que nos podían sacar éramos nosotros mismos. Los gobiernos pueden dictar normas, pero la confianza la debemos poner en la fuerza de toda la sociedad. Tengo anotada esta frase que es sugerente al respecto: “Sé lo que tengo que hacer ahora, tengo que seguir respirando porque mañana saldrá el sol. ¿Quién sabe lo que la marea podría traer?”…Una sentencia de Gilbert Keith Chesterton: «Optimista es el que os mira a los ojos; pesimista, el que os mira a los pies». Es una llamada al optimismo que viene muy bien en este sábado primaveral. Hay una frase de Abraham Lincoln que viene a la medida: «Nos podemos quejar porque los rosales tienen espinas o alegrarnos porque los espinos tienen rosas». El día y vida es como se les mire. Marco Aurelio lo decía de otra manera: «Medita la belleza de la vida. Mira las estrellas y mírate a ti mismo corriendo con ellas»…Además tal día como hoy nacía en 1748 la escritora, dramaturga y feminista francesa Olympe de Gourges, seudónimo de Marie Grouze, autora de la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana, detenida por su defensa de los Girondinos (nombre dado a un grupo político moderado y federalista de la Asamblea Legislativa y de la Convención Nacional Francesa), por lo que fue juzgada sumariamente y murió guillotinada. Nos dejó, en su herencia, esta hermosa frase: “Mujer, despierta; el rebaño de la razón se hace oír en todo el universo; reconoce tus derechos”…Cómo olvidar a Rabindranath Tagore (7 de mayo de 1861), poeta y filósofo bengalí, que revolucionó la literatura de su país con algunas de sus obras y se convirtió en uno de los observadores más lúcidos y en uno de los críticos más severos de la europeización de la India. Este escritor, poeta, músico y novelista, obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1913. Le recordamos en estas frases de su autoría: “Cruzamos el infinito a cada paso; nos encontramos con la eternidad en cada segundo” y “Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas”…También merece una alusión la recordada Almudena Grandes (7 de mayo de 1960). Dos textos de la autora de Las edades de Lulú: “Yo no estoy en edad para mendigar amistad. Valoro a los que están, aprecio a los que se quedan, y les deseo muchísima suerte a todos los que se van” y “Hay que ser muy valiente para pedir ayuda, Pero hay que ser todavía más valiente para aceptarla”…Hoy también hago presente al gran Mario Benedetti con esta preciosa declaración: “Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace. La gente que cultiva sus sueños, hasta que esos sueños se apoderan de su propia realidad»…Al final una cita del docente y orador Víctor Küppers, considerado un gestor del entusiasmo: “Lo más importante en la vida es que lo más importante sea lo más importante”, un juego de palabras que tiene mucho sentido…