Hay que ser como un cactus

BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / «Hay que ser como un cactus, dijo la abuela. Adaptarse a cualquier momento, tiempo y circunstancias…Ser fuerte y aun así, nunca olvidarse de florecer”. Tiro de esta leyenda que tiene como protagonista al cactus, una planta que en algunas culturas significa fortaleza y paz. Justamente lo que necesitamos en este momento para hacer mejor la travesía. Como dice el escritor Robert Harold Schuller: “Los tiempos difíciles nunca duran, pero la gente dura sí”. La última frase escogida para este inicio tiene mucho que ver con la alerta permanente para no dejarnos afectar por la situación de adversidad. Es del poeta Rabindranath Tagore: “Si por la noche lloras por no ver el sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas”…De entrada merece un recuerdo el emperador romano Marco Aurelio, apodado El Sabio o El Filósofo, nacido tal día como hoy, en el año 121. Su gran obra, Meditaciones, aún está considerada como un monumento al gobierno perfecto, de hecho se la suele describir como “una obra escrita de manera exquisita y con infinita ternura”. Tiene citas que vale la pena reproducir, como estas: “Cuando te levantes por la mañana, piensa en el precioso privilegio de estar vivo, respirar, pensar, disfrutar y amar” y “La dulzura, cuando es sincera, es una fuerza invencible”…Una expresión de William Shakespeare: “Las palabras están llenas de falsedad o de arte; la mirada es el lenguaje del corazón”. Hoy el homenaje lo dedicamos a la figura del escritor más célebre en lengua inglesa, nacido el 26 de abril de 1564. Su literatura se caracteriza, entre otros muchos rasgos, por su poder de síntesis. Su obra es grandiosa. La cita escogida quiere decir que es relativamente fácil jugar con las palabras, se pueden expresar con ellas grandes mentiras o hacer magníficos discursos agradables al oído. En cuanto a Shakespeare solamente con sus versos hubiera ya pasado a la historia de la literatura; por su genio teatral y especialmente por el impresionante retrato de la condición humana en sus grandes tragedias, nadie discute que se trata del mejor dramaturgo de todos los tiempos. Varios testimonios de su autoría: “Ama a todos, confía en unos pocos, no hagas mal a nadie”, “Un hombre que no se alimenta de sus sueños envejece pronto” y “El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos”…También un día como hoy, en 1898, venía al mundo otro destacado poeta español de la llamada Generación del 27, Vicente Aleixandre. Fue Premio Nacional de Literatura y Premio Nobel de Literatura en 1977, “por una obra de creación poética que ilustra la condición del hombre en el cosmos y en nuestra sociedad actual, a la par que representa la gran renovación, en la época de entreguerras, de las tradiciones de la poesía española”. Nos dejó de herencia frases magistrales: “Saber es alentar con los ojos abiertos. ¿Dudar? Quien duda existe. Sólo morir es ciencia”. Y una buena definición de la lealtad: “Ser leal a sí mismo es el único modo de llegar a ser leal a los demás”…Entre los personajes escogidos para la ocasión también figura el escritor australiano Morris West (nacido el 26 de abril de 1916), más conocido por su obra Las sandalias del pescador, donde anticipó la elección de un papa eslavo, quince años antes de la asunción de Karol Wojtyla como Juan Pablo II, del mismo modo que en 1988 publicó la novela Eminencia, donde nuevamente profetiza la llegada de un papa, en este caso el actual Francisco. West es el escritor más leído de la historia literaria de Australia, con 60 millones de ejemplares vendidos y más de treinta libros publicados. Dos expresiones suyas: “El ejemplo es una lección que todos los hombres pueden leer” y “La libertad más difícil de conservar es la de equivocarse”…Otro escritor que merece ser recordado es el noruego Bjornstjerne Bjornson, fallecido el 26 de abril de 1910 y que también fue Premio Nobel de Literatura en 1903, al igual que es autor del himno de su país con el título de “Sí, amamos a esta tierra”. Fecundo escritor, dramaturgo y polemista, su temática estuvo centrada en piezas realistas y sociales. Esta frase es suya: “No te quejes bajo las estrellas sobre la falta de puntos brillantes en tu vida”…El mismo día, en 2005, nos dejaba el notable escritor paraguayo Augusto Roa Bastos, muy reconocido en la literatura latinoamericana, ganador de diferentes premios, como el Cervantes. Producida en su mayor parte en el exilio, la obra de Roa Bastos se caracteriza por su retrato de la realidad del pueblo paraguayo y su novela Yo el Supremo es su principal obra, en la que, como en el resto de su producción literaria, desarrolla el tema del poder…Un retazo de Haruki Murakami: “Las estrellas son como los árboles en el bosque, viven y respiran. Me están mirando”…Otro de Julio Cortázar: “Cuando me hayan devuelto mi casa y mi vida, entonces encontraré mi verdadero rostro”…La cita final está hoy reservada a García Lorca: “Hay cosas encerradas dentro de los muros que, si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo”…