Sube el paro en Jaén en un 1,14%, o, lo que es lo mismo, en 651 personas, e indudablemente es un mal dato que viene a poner un acento de preocupación en la severa realidad económica por la que atravesamos, da la impresión de que tardan aún en llegar los efectos del tan cacareado fin de la crisis, según confirman los analistas. Ya lo habíamos advertido, son tantas las rémoras de la provincia que era previsible que seríamos los últimos en notar un mejor panorama económico, siempre en términos relativos, porque salir del pozo no es nada fácil.
Es curioso observar el comportamiento de los agentes sociales cada mes cuando el INEM ofrece los datos del paro registrado. Siempre el mismo discurso, si el desempleo sube la Junta echa la culpa a Madrid y el PP al gobierno andaluz. Es la letanía que cada treinta días repite sin cansancio el veterano dirigente popular, ahora en el Senado, Gabino Puche, que en cambio cuando de vez en cuando las cifras bajan en Jaén, rara avis, con toda rapidez le apunta el benéfico dato a las políticas de Rajoy, exactamente igual que hace la Junta colocándolo en su haber.
Los datos sin añadidos de ninguna clase son los siguientes: El año pasado por estas fechas estábamos en 65.905 parados y hemos pasado a los 57.797 con una población ocupada de 221.366. El año pasado el paro en este mes subió en 1.153 trabajadores, en 2014 lo hizo en 1.084, en 2013 descendió en 334 y en 2012 subió en 2.560 personas. Con respecto al mes de agosto se reduce el desempleo en agricultura, en 242, en servicios aumenta en 1.306 y en colectivo sin empleo anterior la subida es de 88 personas. El desempleo masculino se sitúa en 24.324 personas, y baja en 290 respecto al año pasado, en tanto que el femenino arroja la cifra de 33.473 mujeres, con un incremento de 943. Comparado con septiembre del año pasado el paro total es de 8.108 personas menos, que se corresponden con 4.715 hombres y 3.393 mujeres.
Este mes sube el paro aunque ligeramente, no es especialmente escandaloso el resultado que dejó septiembre, tras varios meses de un comportamiento más favorable por la especial situación del sector servicios; ahora hay que estar a la expectativa porque entre la vendimia francesa y la próxima recogida de la aceituna, lo normal es que se detenga la sangría, al fin y al cabo el panorama del paro en la provincia es de una situación estructural del mercado de trabajo, pero también, con la economía que tenemos, por los ciclos anuales, y ahora se abre uno de carácter positivo, que depende de la cosecha de aceituna que se vaya a recoger y de la que pronto se conocerán los primeros aforos.
Esta vez cerramos la lista de las provincias andaluzas en aumentos de paro, otras veces la hemos abierto, algo es algo, y al menos es una oportunidad para tomarse un respiro, pero la realidad de las cosas nos proporciona poco consuelo, porque los últimos años han sido duros de solemnidad. Nuestro registro es bastante alto, estamos en 57.797 desempleados, y aunque fuera uno solo ya sería motivo de inquietud. Cada parado o cada familia en situación de desempleo es un drama muy serio que hay que intentar resolver con los medios que sea posible. No podemos olvidar que hace poco se hacía público el dato de que había más de 27.000 hogares en la provincia con todos sus miembros en edad laboral en paro, al menos una quinta parte en la capital, por tanto las administraciones y los agentes sociales y económicos tienen mucho que hacer más que lamentarse ante este panorama desolador y por ahora sin perspectiva alguna de erradicar.