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Por ANTONIO GARRIDO / Hoy nos ha visitado el temporal. Logramos escaparnos de la Dana porque pasó por Jaén levemente, pero esta jornada es una prueba evidente de que estamos en invierno, más que por la lluvia, que también, por el aire de Jaén que ha hecho que se adopten medidas para evitar incidencias. De lo que estamos necesitados es de lluvia, ha llovido poco, de hecho en la consulta que acabo de hacer sobre la situación de los embalses de la provincia el resultado es que en este momento se encuentran a una media del 30,98% y en concreto el pantano de Quiebrajano, que tantas veces nos sirve de referencia, lo tenemos al 30,30%. Hace falta la lluvia y si es preciso nos ponemos a hacer rogativas, el caso es que hay que llegar por lo menos a la mitad de la capacidad de embalsamiento para aguardar la llegada del verano con cierta tranquilidad.

En relación con los asuntos ciudadanos ahora cada dos por tres nos llegan noticias sobre la puesta en marcha del tranvía, que necesita de muchos trabajos previos, más que nada porque la infraestructura está muy deteriorada. Parece que todas las partes implicadas se han puesto a colaborar y dicen que antes de que acabe el año los vagones estarán circulando por el trayecto pensado en su día, que como todo lo que se hace en Jaén, tiene dividida a la población, de modo que cada jienense tiene su propio itinerario que poco coincide con el que diseñaron los mandamases de hace quince años. Y encima nos piden que exterioricemos la alegría por la llegada de la infraestructura, que algunos que se dicen expertos entienden que la moda del tranvía en las ciudades ya va de retirada, aunque no debe ser nuestro caso porque ni lo hemos probado. Ni optimista, ni pesimista, hay que ponerlo en circulación y será entonces cuando veamos el fervor que tiene el sistema tranviario entre los jienenses. Por lo pronto, lo que sí ha dicho el equipo de gobierno del Ayuntamiento es que tiene a punto la cantidad que le corresponderá abonar como garantía del déficit del servicio. Lo había preguntado el PP, en concreto su parlamentario andaluz Manuel Bonilla, pero al instante el concejal Francisco Lechuga, responsable de Hacienda, ha resuelto esta inquietud. Sí, está el dinero.

Este del tranvía es un ejemplo muy claro del conformismo de Jaén por la sencilla razón de que la política ha ido actuando a su antojo y los jienenses, mientras éramos el hazmerreír de toda España, en especial los visitantes a la ciudad que no podían entender este monumento al despropósito, no hemos tenido el valor suficiente como sociedad civil para movilizarnos y pedir a los responsables públicos celeridad porque desde el año 2011 que el tranvía salió en pruebas hasta hoy es demasiado tiempo. Supongo que los numerosos conformistas del lugar no plantearán ahora que preparemos un homenaje público, medallas incluidas, a todos los que han contribuido con la inacción a que los vagones siguieran en cocheras. Los nombres los conocemos, del primero hasta el último, y tal vez podría ser necesario poner a prueba la memoria de la ciudadanía. Hoy nos quedamos con lo bueno, la consejera del área, que ha estado en Jaén, tiene claro que se está en la cuenta atrás. Pero olvídense de hacer dle tranvía recurso electoral, porque no hay nadie que esté legitimado.

Donde progresamos adecuadamente es en carriles bici, porque hace unos días entraba en servicio el de la variante sur y hoy lo ha hecho el de la Carretera de Córdoba, en este caso con una novedad, han estado todos los políticos representativos juntos, no el espectáculo de la ocasión anterior, cada uno en un día diferente. Ya sabemos que en muchos casos las relaciones no son ejemplares, pero estar en los cargos requiere de un mínimo de lealtad institucional, en todas las direcciones, porque para según qué asuntos están condenados a entenderse.

He seguido por las redes sociales algún debate sobre el conformismo de Jaén a raíz de los anuncios del ministro Puente, sin intervenir, porque no vale la pena debatir con los representantes de los partidos, puesto que tienen sus ideas y es no difícil sino imposible bajarles de ellas, pero he leído barbaridades impresionantes. Los partidos son todos iguales, inamovibles, y tienen la habilidad de cambiar de opinión solo en el caso de que afecte positivamente a sus intereses. Lo digo por todo lo que se mueve en general en la ciudad, no solo por las propuestas del ministro, que también. Hoy me vuelve a llamar la atención, con respecto al tren que se proyecta hacia Madrid, vía Montoro, para acceso a la alta velocidad, cómo se deja a su suerte, otra afrenta más, a Linares-Baeza, que con el tiempo fue perdiendo servicios ferroviarios y la condenaron a ser de segunda o tercera clase cuando en su día fue una estación de referencia, con un tráfico impresionante. Ya no es ni su sombra, el día que nos condenaron a la irrelevancia lo fue a toda la provincia. Ahora Linares-Baeza sufrirá un nuevo revés, pero tampoco he notado que nadie se haya movido para protestar, parece que llega un momento en el que ya nos da igual ocho que ochenta.

Ruido en Educación. Las AMPAs ya empiezan a conocer algunos proyectos de la Consejería para reducir líneas en algunos centros educativos de la capital y de la provincia. Hacen bien en combatir estas deficiencias y en el caso de la ciudad de Jaén los padres, mejor sería decir las madres, están dispuestas a mantener su lucha para evitarlo, casos de los colegios Alfonso Sancho y Almadén. Esta mañana han estado en el Ayuntamiento trasladando su malestar y buscando el apoyo del equipo de gobierno. Todos los años por estas fechas, cuando se inicia el proceso de elección de centro se pone en marcha este movimiento reivindicativo, es inevitable porque la Delegación de Jaén procura no hacer mucha publicidad de sus proyectos de rebajas y tienen que informarse los padres en el momento justo de tomar las decisiones. Y está a punto de caramelo que conozcamos si la Junta cumple o no cumple con las universidades andaluzas con el Modelo de Financiación al que dan largas, aunque sea de obligado cumplimiento, de manera incomprensible, mientras dan a conocer informaciones que no responden a la verdad y que no hacen más que confundir, pero es lo que ocurre cuando falta la voluntad política, hay que acudir a las malas artes. Con esta actitud lo que consiguen es seguir creando malestar en las universidades, en todas, y especialmente en la UJA con la que no se está actuando con justicia.

El panorama político provincial está centrado casi exclusivamente en las elecciones primarias que van a tener lugar el domingo próximo, día 16, para decidir cuál de los dos candidatos sustituirá a Francisco Reyes en la secretaría general del PSOE en la provincia de Jaén. La campaña, que ya anuncié en su momento que iba a ser a cara de perro, está siendo así y los protagonistas, Ángeles Férriz y Juan Latorre, están haciendo grandes esfuerzos para llegar a la militancia de toda la provincia, porque una persona es un voto, y un voto puede decidir. Por lo que se ve en los medios de comunicación y en las redes sociales, ambos candidatos gozan de predicamento, claro que uno no ha salido de su pueblo y la otra ha acumulado responsabilidades más allá del medio local. Latorre se está presentando como “el cambio” en tanto que Férriz ha hecho slogan de su campaña “el poder de la militancia”. Hay mucha tensión, es evidente, tanto por lo que se dice explícitamente como por lo que se entiende entre líneas. Y claro que hay dos posiciones encontradas y una de ellas es la que representa a la dirección del partido que tiene su candidato. Una carta difundida por el PSOE de Cambil, que yo mismo recibí, ofrece todo tipo de detalles sobre la batalla, de hecho no sé si habrá pasado a la comisión de garantías.

Después de este duro duelo sorprende que ambos candidatos se ofrezcan, cualquiera que sea el elegido, a integrar a su rival en su equipo. Si es así, no sé qué ha impedido que previamente llegaran a un acuerdo en aras de la unidad, aunque es fácil imaginarlo, ambos optan legítimamente a ocupar el cargo y mientras Ángeles Férriz lo tiene más complicado, porque no dispone más que del apoyo de un grupo numeroso de gente que la está aupando y legión de militantes, Juan Latorre posee el mismo capital pero goza de respaldo desde el poder y sus aledaños, por ejemplo ha sido públicamente avalado por el adjunto a la Secretaría de Organización Federal socialista, Juan Francisco Serrano, que en estos momentos es el político jienense más próximo a la cúpula tanto del partido como del Gobierno. La neutralidad está en entredicho, más claro aún, todo el mundo, dentro y fuera del PSOE jienense sabe que hay un favorito, que por otro lado es una persona de la que todo el mundo habla bien, el caso es que no han salido a luchar en igualdad de condiciones, aunque Ángeles Férriz tiene mucha fuerza y le avala su trabajo, su actitud de animal político, y además reivindica su derecho de ser la primera mujer secretaria general. Hoy ha estado circulando la posibilidad de establecer un debate entre ambos en la sede socialista y moderado por un profesional del periodismo. Estaría bien porque en un cara a cara se pueden dar opciones para decantarse, sobre todo al sector de la militancia que no lo tenga claro, aunque dudo que haya muchos en esta situación. Aquí cada uno ha hecho su trabajo, la oficialidad también, basta con seguir las redes sociales y pasar revista a algunas imágenes, para que luego nos pretendan vender que los niños vienen de París.  

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