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Los datos del paro casi siempre son un jarro de agua fría para la provincia. Para nuestra desgracia cada mes con las cifras del paro registrado y cada tres meses con la Encuesta de Población Activa (EPA), nos da un disgusto el desempleo. Sin embargo los datos correspondientes al tercer trimestre del año 2017 son buenos a nivel nacional, algo menos favorables para Andalucía y en Jaén el panorama es menos dramático que en otras ocasiones, no estamos en el pelotón de los torpes y dentro de lo malo no salimos excesivamente perjudicados. 

En este momento para la EPA no somos la primera provincia española y andaluza en desempleo, nuestra tasa de paro es del 27,01%, frente al 30,76% del anterior trimestre, mientras la media andaluza es del 25,41%. Aparecemos dentro de la comunidad andaluza en la cuarta provincia con mayor porcentaje de parados, tras Córdoba (30,21%), Almería (27,65%) y Cádiz (27,61). Detrás de Jaén aparecen Granada (26,95%), Huelva (25,92), Sevilla (23,54) y Málaga, (20,88%). Además en este momento contamos, siempre según estos datos, con 78.900 desempleados, frente a los 92.000 de la oleada anterior, del mes de julio. La tasa de actividad se encuentra en el 54,46% y la población ocupada asciende a 213.100 personas, frente a los 207.500 de la vez anterior.

De todos modos hay que dar un valor relativo a los números, porque en el segundo trimestre los resultados fueron demoledores, estamos en una provincia donde tienen mucho que ver los ciclos y las circunstancias de un mercado de trabajo muy singular, tan dependiente siempre del monocultivo del olivar. Teniendo en cuenta la merma de la cosecha de aceituna, que en semanas se va a empezar a recoger, y con una estimación de pérdida de alrededor de un millón de medio de jornales, si se cumplen las expectativas más pesimistas del aforo de la campaña, recién presentado, las previsiones no pueden ser muy optimistas, por tanto las autoridades deben abstenerse de lanzar las campanas al vuelo. Será en el próximo trimestre o quizá mejor en el primero de 2018, cuando venga el tío Paco con las rebajas y la Encuesta de Población Activa nos diga la situación real y el recorrido que han tenido las cifras de cierto alivio de las que hoy nos hacemos eco. 

Las administraciones que operan en la provincia no deben esperar a periodos de cierta bonanza para tomar posiciones y exigir medidas a los gobiernos, por el contrario urge actuar, no hay que esperar milagros en desempleo debido a la situación general de la provincia, porque hacen falta muchos cambios y muy profundos para dejar de estar en el selecto club donde el paro está por las nubes y como es lógico, en vez de pelearse nuestros representantes políticos deberían esforzarse mucho más en la búsqueda de soluciones efectivas. He escuchado algunas reacciones de políticos y agentes sociales y en algunos casos he llegado a sentir vergüenza ajena de cómo se eximen de responsabilidad cuando no se hacen lecturas equivocadas. Lo entiendo en los políticos, pero desde luego mucho menos en los agentes sociales y económicos que no pueden hacernos comulgar con ruedas de molino. Podemos dedicarnos ahora a buscar a los culpables cuando los registros son alarmantes, pero es mucho más práctico dedicarse a buscar soluciones.

En lo que tendríamos que estar todos de acuerdo es en que las elevadas cifras de paro lejos de ser un arma arrojadiza tendría que suponer que los partidos, administraciones y agentes sociales, sentados en una misma mesa, hicieran sus lecturas de la situación de emergencia para buscarle situaciones a esta escalada en lugar de echarse la culpa los unos a los otros como de hecho ocurre cada vez que aparecen los datos.

Por desgracia lo que está sucediendo en Jaén con el desempleo no es una sorpresa, mensualmente venimos advirtiendo de lo que es una tendencia y dice bien a las claras que en esta provincia la crisis se ha cebado con rotundidad y ahí están sus consecuencias, incluso cuando en el panorama nacional se habla de recuperación, y algunos datos ciertamente lo avalan, nosotros seguimos estancados y con escasas expectativas, de ahí que volvamos a clamar por un acuerdo, una especie de gran coalición, imprescindible para frenar el drama que con los fríos datos es una severa amenaza para Jaén.

Y lo peor de todo es que no esperamos ninguna reacción a los datos que se ofrecen, a partir de mañana cada cual va a seguir en lo suyo, hasta los próximos registros que no variarán mucho porque el problema no es otro que el modelo, el caso es que el paro y todos los indicadores van certificando la incompatibilidad con un futuro de progreso y desarrollo. Por eso podremos pedir planes de empleo, disminución de los jornales para asegurar las ayudas, todo y eso y más ha de suceder, pero hay que ir a la raíz del problema y esto es lo que no vemos por ninguna parte.

Foto: Veremos el comportamiento del paro en los próximos meses. Las expectativas de una baja campaña de aceituna puede ser determinante.

 

 

 

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