Por ANTONIO GARRIDO / Como ya ocurrió el año pasado les adelanto que todo hace indicar que tampoco en diciembre próximo se espera que haya presentación de la cerveza especial de Navidad. Fue en 1982, hace la friolera de 40 años, cuando se inició una tradición rota en 2021, nos quedamos sin la cerveza especial de Navidad elaborada en Jaén y que venía siendo un clásico en el pórtico de las celebraciones. Otro revés, porque se trataba de una tradición y un esperado encuentro social, de hecho hay una leyenda que dice que quien no asistía a ese acto multitudinario en la fábrica cervecera es porque no era nadie en Jaén. Un clásico de la innovación y de la creatividad esa demandada cerveza. Una pena porque nos acompaña una historia, sobre todo con la emblemática Alcázar, que también se vistió de Navidad, y cada año era esperada por los establecimientos y los jienenses en general como un rito más de las fiestas, un producto de especial elaboración, con el trabajo de los mejores maestros cerveceros, para brindar en uno de los momentos más especiales del año. Nos la quitan. El nuevo rumbo empresarial no concede importancia al hecho de que una provincia esté tan encariñada con una marca desde hace un siglo.
Pero no es solo eso, es que, además, es evidente que la cerveza que siempre hemos considerado jienense pierde fuerza en el mercado, no hay más que ver los palets en los centros comerciales de marcas llegadas de otras provincias, aprovechando la circunstancias y van ganando mercado poco a poco. Por si no teníamos bastante, la Fundación Cruzcampo, que durante años fue un activo importante para apoyar eventos culturales y sociales, una labor impagable en la que hay mucho que agradecer a Domingo Moreno, y que tenía especial predilección por los acontecimientos musicales, también se hizo desaparecer. De la misma manera se cargaron la Escuela de Hostelería, que también era un referente, en la que se formaron decenas de profesionales y que estaba llamada a ser un centro para, con el apoyo de la Diputación, especializarse más aún si cabe en la cocina made in Jaén, que ahora tanto se valora.
Es sorprendente que los directivos de Heineken vengan a Jaén y vendan a las autoridades lo mucho que invierten y su compromiso con esta ciudad y la provincia, como ocurrió en julio pasado durante el encuentro que mantuvieron el presidente de Heineken España, Etienne Strijp, y el alcalde de la capital, Julio Millán. Fue para comunicar que la de Jaén es la primera fábrica cervecera cero emisiones, cero residuos y cero huella hídrica de España. En efecto, la relación empresarial se remonta a 1921 y Heineken se jacta de haber invertido 6,4 millones en fechas recientes para aumentar la eficiencia de la planta envasadora de Jaén, pero las palabras que en julio pasado se pronunciaron en torno a la implicación de la firma con Jaén admite duda a la vista de los acontecimientos, sin entrar en más detalles. Eso de que “el compromiso con Jaén es incuestionable” y que “somos parte de esta comunidad y conscientes del papel que la industria y la cerveza puede jugar en la vida diaria de su gente”, no dejan de ser frases bonitas de cara a la galería, pero que en esencia no se corresponden con la verdad.
En cuanto a la ciudad lo más destacado del día es que se ha dado a conocer el cartel oficial de la próxima Feria de San Lucas, que ya tenemos a la vuelta de la esquina. Se trata de una llamativa imagen, muy conseguida, de autora jienense para más señas, Carmen Perabá. No hay más que enfrentarse a él para mostrar la señal de asentimiento. Enhorabuena a la artista y al jurado por la elección. Y por cierto, me llegan noticias de fuentes de la hostelería en el sentido de que se espera una feria de normalidad tras estos últimos años tan complicados.
En política, además de señalar que mañana toman posesión los nuevos delegados de la Junta, y que los nombres de los elegidos ha dado para comentarios de todos los gustos, hay que añadir que donde se vive un momento difícil es en lo que queda de Ciudadanos, donde lentamente se va produciendo la desbandada, los hay que se van a casa, quienes optan por acercarse al PP y los que se inclinan por crear espacios que propicien de alguna manera la refundación del partido. Miguel Moreno, el alcalde de Porcuna, que ha sido el responsable de mantener la estructura de lo que quedaba de Ciudadanos, trata de mantener el pulso político, aunque si no obra un milagro las perspectivas electorales para los comicios de 2023, en el caso de que digan de presentarse, son bastante negras, puede que a excepción del propio Moreno, que tiene la suerte de ser profeta en su tierra y su pueblo le puede seguir premiando su buen hacer.
Por último cabe felicitar a la Peña Flamenca que está celebrando con gran éxito su medio siglo de existencia, con un programa a la medida del prestigio que ha conseguido esta institución flamenca, uno de los referentes en Andalucía. También destacar los buenos resultados que viene deparando el Palacio de Deportes Olivo Arena. Los acontecimientos de relieve nacional que se están propiciando contribuyen a dar vida a la ciudad, como la actual Eurocopa de Fútbol Sala. Qué enorme logro haber conseguido para la capital esta infraestructura deportiva gracias a la Diputación y la Junta, qué cantidad de acontecimientos de nivel hemos conocido, y sobre todo qué futuro aguarda por el hecho de haber sido ambiciosos y conseguir para Jaén una instalación como la mejor que pueda haber en España. De esto estamos necesitados, de obras para sentir orgullo.
Foto: El Olivo Arena ha dado ya grandes satisfacciones a Jaén.