Me van a permitir una leve sonrisa irónica a costa de la memoria del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, correspondiente al pasado año 2016, en la que se reivindica, y se supone que es la opinión del presidente del alto tribunal andaluz, Lorenzo del Río, jienense para más señas, la Ciudad de la Justicia para Jaén.
Un año más, y van… se incluye esta aspiración a la que los profesionales no renuncian porque es la única solución a la dispersión de órganos judiciales en la capital y a las deficiencias que presentan algunas de las sedes.
El alto tribunal sigue erre que erre parece que sin importarle demasiado el proceso que se sigue con los terrenos a cuenta de la pereza de la Junta por afrontar el proyecto, que no da votos según dijo hace poco el alcalde, pero al TSJA creo que no le importa tanto el lugar como que el órgano judicial se haga cuanto antes, aunque a estas alturas me parece que la Judicatura no da un euro por este proyecto. Ahora, además, ha surgido el tema de Marroquíes Bajos, y con el revuelo que se ha liado a costa de los desmanes del pasado, nadie se atrevería a construir en este lugar que se había fijado en su momento. Ya que las cosas han venido rodadas, mejor que entre todos traten de tapar las vergüenzas de abandonar unos restos arqueológicos tan extraordinariamente valiosos que mejor que nadie las autoridades, que tienen sus técnicos, deberían haber valorado en su justo término. Pero tampoco vamos a decir que nos resulte demasiado extraño. A estas alturas…
Ya hemos olvidado hasta el origen de esta petición a la Junta, pero trasciende a varios titulares de la Audiencia Provincial y a varios decanos también del Colegio de Abogados, dos instituciones del ámbito de la Justicia que hace años hicieron bandera con este proyecto, que poco a poco se ha ido olvidando porque la Junta de Andalucía ha dilatado la obra y ha puesto todas las excusas posibles. De modo que la Ciudad de la Justicia ni está ni se le espera.
El gobierno andaluz y en concreto la Consejería de Justicia cuando viene el titular correspondiente, por cierto de higos a brevas, se salen por los cerros de Úbeda o se inventan salidas que no están en el guión, como aquella de la inversión público-privada. La verdad es que creo que se trata del proyecto estrella en la lista de espera, en un baúl de los recuerdos donde la Junta, tan mezquina con Jaén, especialmente con la capital, ha ido acumulando iniciativas, las mismas que han impedido que esta ciudad dé el salto cualitativo que se merecía. Pero nos llama la atención que el TSJA insistan en colocar en su memoria que Jaén necesita una Ciudad de la Justicia, seguramente que con la intención de que alguna vez suene la flauta.
Foto: El presidente del TSJA, Lorenzo del Río, presentando la memoria del alto tribunal andaluz correspondiente al pasado año 2016.