JAÉN, 4 DE SEPTIEMBRE DE 2017.- Los jienenses ya sabemos de sobra que esta ciudad no se despereza hasta que pasa la feria de San Lucas. Ahora se empieza a funcionar a medio gas, aunque este curso es bastante diferente en el sentido de que hay urgencias, se han de producir citas importantes, viene cargado de interrogantes de tipo político y en el ámbito ciudadano qué les voy a decir, si ya hasta se están postulando las candidaturas a las próximas elecciones municipales, y eso que queda aún un trecho, si bien es cierto que hay que tomar tiempo y que no es bueno improvisar.
Tenemos que convenir, pese a todo, que el peor pronóstico que se está dando en Jaén, se refiere al paro. En el mes de agosto ha vuelto a subir en 807 personas, lo cual no es una noticia agradable, de todas maneras tenemos que estar preparados porque lo peor está por venir. Estamos hechos a una sucesión de ciclos durante el año y el único alivio se da cuando se produce una buena cosecha de aceituna. Hoy he estado examinando los datos del desempleo de acuerdo con las cifras que facilita el INEM y es cierto que hay menos paro que el año pasado por estas mismas fechas. No es para tirar cohetes, entre otras cosas, porque este panorama lo que viene a recordarnos, si es que lo queremos ver con la nitidez que merece, es que lo peor que le está pasando a la provincia y también a la propia capital, es que muchísimos jóvenes están cogiendo la maleta y se están marchando. De todos los desgarros que sufre Jaén, este es sin duda el más doloroso y cruel. Formamos a nuestra juventud para que se marche a buscar salidas laborales a otras zonas de España o fuera de ella. Esta semana, sin ir más lejos, he conocido varios casos con nombres y apellidos, a los que podría añadir los que amablemente pudieran aportar los lectores. Mal futuro para esta tierra si no somos capaces de retener en ella a esa gente que no encuentra ninguna expectativa. Repito, es lo peor que nos puede pasar.
POLÍTICA: EN TODOS SITIOS CUECEN HABAS
Por lo que se refiere al panorama político, poco ha cambiado en la situación del Partido Popular de Jaén, y si ha habido algún cambio, ha sido a peor. Continúa la división interna entre los dos sectores, el de Juan Diego Requena, que salió elegido en el congreso provincial del mes de mayo, y los críticos de Miguel Moreno, que se consideran los auténticos vencedores al haber contado previamente con una respuesta sin paliativos de la militancia. Ya se sabe que Moreno acudió a los tribunales para tratar de encontrar un pronunciamiento favorable, pero, tal vez ante la creencia de que esta vía no le va a ser muy propicia, porque no veo yo a un juez metiéndose en las guerras de partidos, ha optado por trasladar la queja ante la Comisión Nacional de Garantías del PP. Tal vez se trate del último cartucho, al menos cabe esperar que el citado órgano pueda aportar algunas claves para solucionar este enconado conflicto en la familia de los populares. Creo que si no se llega a una especie de armisticio, el panorama es susceptible de empeorar y menudo problema el que se le presentaría al partido de Rajoy para las próximas citas electorales. Sería bueno que imperara la cordura y se le buscaran salidas, la democracia y la provincia necesitan un Partido Popular fuerte y en lo posible unido.
Reconozco que tengo simpatía por la opción que representa Moreno, pero no por nada en particular, sino porque ha tenido que combatir con una dirección dura e inflexible y en la que Fernández de Moya debió mantenerse neutral en lugar de estar manejando su relevo y autonominándose presidente de honor, que en las circunstancias actuales, era un gesto sobrado de altivez. Moreno y su gente están pidiendo que se le abra expediente al expresidente y actual secretario de Estado y a quien en lo formal dirigió las tareas del congreso, el diputado nacional Javier Calvente. Este culebrón promete. De todas maneras me parece que parte de la culpa de la situación a la que se ha llegado la tiene la dirección regional. A Juanma Moreno le ha faltado valentía y decisión política para enfrentarse seriamente al caso de Jaén y ha optado por la inacción. Ya se sabe que sus relaciones con el secretario de Estado no son las mejores, pero ha debido imponer su autoridad y sentar a las partes en torno a una mesa y no abandonar hasta llegar a un principio de acuerdo.
En el PSOE no es que se viva la misma situación pero su proceso congresual no va a ser un paseo militar, al menos en sus prolegómenos. Francisco Reyes no estará solo en la previa de la carrera hacia la dirección en el cónclave previsto para el 21 de octubre. Hay dos militantes, Valeriano Bermúdez y Félix Manzaneda, que se han posicionado en la intención de acompañarle y aspirar al liderazgo, cosa diferente es que lo consigan. El problema está en que para entrar en la carrera se precisan un 20% de avales de la militancia, que es un requisito difícil de cubrir, aunque se trata de una norma interna que viene funcionando, si bien es susceptible de ser variada por los comités provinciales. En Jaén no se ha hecho así y por tanto no puede haber duda de que Reyes va a salir a flote sin ninguna dificultad y seguramente será finalmente único candidato. Ahora bien, hubiera sido un gesto favorable rebajar los porcentajes y volver a la cultura que en otros tiempos vimos en los socialistas jienenses, donde se manifestaban las posiciones de los sectores críticos con total normalidad y no pasaba nada, unos ganaban y otros perdían, simplemente.
EL TRANVÍA, SERPIENTE DE VERANO
En la crónica de la ciudad empecemos por decir que a pesar de la situación económica del Ayuntamiento, que se ha vuelto a recordar en estas últimas semanas, el milagro ha sido ver que ha funcionado con normalidad. Siempre digo que me llama la atención la tarea del concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, que con el marrón que tiene logra que parezca lo que muchas veces no es. Pero la verdadera serpiente de verano ha sido y sigue siendo el dichoso tranvía. Desde el equipo de gobierno, y no por parte del alcalde, se nos están recordando los reparos del Tribunal de Cuentas por el despilfarro y la falta de un plan de viabilidad. Noticias fresca. A propósito de esta cuestión Miguel Contreras se hartó de lanzar dardos a diestro y siniestro aprovechando que estaba de alcalde en funciones. Casi nada nuevo bajo el sol, lo que ocurre es que vamos para siete años del tranvía parado y hay un enorme hartazgo en todo lo referente al sistema tranviario. Ahora ha hablado la primera teniente de alcalde, Reyes Chamorro, y ha apuntado denuncias que sí me parecen de calado, al referirse a desvío de fondos y otras posibles irregularidades. No sé si se trata de hacer presión para que la Junta no se piense más encarar el costo de la puesta en marcha y mantenimiento del servicio público, pero hay determinadas situaciones en las que no cabe más que irse directamente al juzgado de guardia, hay casos en los que no se debe tirar la piedra y esconder la mano. En todo caso lo del tranvía es sencillamente indignante, por una parte y por la otra, han conseguido que la ciudadanía se harte. Es un buen ejemplo de lo que no debe ser la política, que teóricamente está para resolver los problemas en lugar de crearlos e incluso recrearlos. Pero es lo que tenemos, por tanto no debemos quejarnos tanto de que el tranvía funcione o deje de hacerlo, sino del panorama, que se repite en otros muchos asuntos, en los que quienes se retratan son nuestros políticos, y no precisamente para bien.
Y otro asunto que parece que trae cola es el del centro comercial Jaén Plaza. Un paso adelante y otro atrás, esa es la impresión que me da este proyecto en el que pienso que hay cosas que se han dejado a la improvisación, porque no es muy entendible que una obra se inicie y al poco se pare. De todas maneras hoy he leído unas declaraciones en el diario Viva Jaén, de un alto responsable del Grupo Alvores y parece que pretende despejar toda clase de dudas. El equipo de gobierno, y desde luego el alcalde, Javier Márquez, han puesto todo el empeño en este proyecto que debería estar funcionando antes de las próximas elecciones municipales.
LA JUNTA, A LA DEFENSIVA
¿Y la Junta de Andalucía, en Jaén? Como siempre, a la defensiva. Este verano leí unas declaraciones de la delegada del Gobierno, Ana Cobo, que no tenían desperdicio. Entre otras cosas, venía a decir que no es verdad que Jaén tenga motivos para sustentar el criterio de que hay un maltrato o una discriminación por parte de la Junta. Esto es vivir en la inopia, de espaldas a la realidad, porque continuamente se le están recordando los casos y hay muchos ejemplos para ilustrarla, demasiados diría yo. Pero ella opta por una actitud a la defensiva y el PSOE jienense hace seguidismo, y quedan mal porque los jienenses leen, escuchan y sobre todo, ven, y saben que la versión de la delegada es la que a ella le interesa para mantenerse en el cargo y servir a quien le paga, pero no es una defensa de los intereses de Jaén. No quiero decir con esto que la Junta no esté haciendo cosas, solamente faltaría eso, pero no es menos verdad que a esta ciudad se le deben muchos proyectos y que es faltar el respeto a los jienenses ir de sobrada y pretender hacernos comulgar con ruedas de molino. Por cierto, la delegada del Gobierno también ha dicho que no habrá cambios en las delegaciones, y le pregunto, ¿tampoco se va a producir el relevo en la delegación territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo? No voy a entrar en el fondo de la cuestión porque para nada hay que inmiscuirse en asuntos privados de las personas, pero una delegación de la Junta, tan importante como la citada, debe estar cubierta, por eso me ha extrañado tanto el pronunciamiento de la delegada expresado de manera tan contundente, tanto que tampoco la entiendo. Una cosa es el respeto debido a la intimidad y a las situaciones adversas de las personas, y otra muy distinta, el interés general y tener al frente de una responsabilidad tan importante a alguien que la pueda desempeñar a pleno rendimiento.
Por lo demás, la delegada de Salud, Teresa Vega, subió hace unos días al Neveral, para tratar de demostrar que la comida que reciben los enfermos, procedente de las cocinas del Neurotraumatológico, llega en perfecto estado. Lo que no sé es si se trataba de un gesto espontáneo o estaba preparado con sus colaboradores para que el resultado fuera el esperado. La delegada ha cantado las excelencias del menú, todo lo contrario que han venido haciendo trabajadores del hospital y sindicatos. ¿A quién creer? Creo que ambas posturas están un tanto exageradas, pero desde luego defiendo a capa y espada que los enfermos del Neveral tengan derecho a una comida digna y lamento que poco a poco se vayan haciendo experimentos con un centro sanitario con el que pienso que las autoridades nunca han sabido bien qué hacer con él. Y en cuanto al comportamiento de los hospitales en verano ha ocurrido lo mismo, fenomenal para los políticos y los altos funcionarios, y cierre de camas y de plantas, como cada año, en la opinión de los representantes sindicales. En las últimas semanas han funcionado en las redes sociales vídeos, en algunos casos protagonizados por Andrés Gómez, que algo conoce del tema por su trayectoria como empleado público de la sanidad, enseñando la rebaja de servicios. También en este asunto el PSOE ha hecho causa común con la versión de la Junta. En el Hospital de Jaén no pasa nada, en la versión oficial es que en Jaén nunca pasa nada.
FOTO: El desgarro más doloroso es ver que muchos de nuestros jóvenes abandonan su tierra.