Estamos acostumbrados desde casi siempre, para nuestra desgracia, en relación con las cifras del paro registrado de cada mes y cada tres meses con la Encuesta de Población Activa (EPA), a llevarnos disgustos a costa del desempleo. Pues bien, los datos correspondientes al tercer trimestre del año 2021, nos aparcan por ahora de esa angustiosa situación de estar a la cabeza del paro en Andalucía y en España, y nos encontramos en una zona más templada. El desempleo lo lidera Huelva, seguida a cierta distancia de Cádiz y Sevilla, y en Jaén nos movemos en el centro de la tabla andaluza, con un 22,59% de parados, porque quienes se salen por sus buenos registros son en primer lugar Málaga, con un 20,18%, que está como un cañón, sin olvidarnos de Almería, que llega al 21,41 de parados, por debajo de la media andaluza que se encuentra en el 22,41%.
Dentro de ese 22,59% citado, el desempleo afecta a un 19,42% de hombres pero en relación con las mujeres se sitúa en un 29,35% que rebasa todos los pronósticos, quiere esto decir que el paro femenino es el que en este momento reclama atención y lanza un SOS para quien lo quiera tener en cuenta. En la actualidad, según esta misma información que nos facilita la EPA contamos con 63.400 parados, muy por debajo del panorama dibujado el pasado año en que se dieron a conocer 77.200 trabajadores en paro y una tasa de desempleo del 27,4%. Todo esto nos permite decir, sin que sintamos la tentación de plantear una visión optimista, que hemos mejorado, si bien falta saber si se trata de un resultado estructural o es una coyuntura debido a los efectos de crisis por la pandemia, ya que la información oficial facilitada con la EPA nos aclara que los trabajadores afectados por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) como consecuencia del covid-19, se clasifican como ocupados en las estadísticas del INE. Quiero decir que no nos hagamos a la idea de lecturas triunfalistas porque aún estamos atravesando la situación pandémica y los registros pueden resultar un tanto engañosos.
Por estas circunstancias es verdad que estamos mejor que en el tercer trimestre de 2020, pero hemos de hacernos a la idea de que no ha habido milagros entre un año y otro, ni existe una varita mágica que nos proporcione mayor estabilidad en el empleo. Eso sí, los datos son los que son, y si no es momento de echar las campanas al vuelo ni de poner énfasis en unas cifras que hay que recibir con prudencia, sí es la hora de la política y de echarle imaginación para seguir ayudando a Jaén a salir de un bache histórico, y solo hay una manera de hacerlo, con la discriminación positiva que solo depende de los gobernantes y que hasta ahora nos niegan en los presupuestos tanto el gobierno central como el autonómico.
A propósito del tema presupuestos, en este caso los PGE, aunque no pensaba por el momento volver a ellos, sencillamente porque me indigna el despropósito y el desprecio a Jaén, que está meridianamente claro, sobre todo si echamos a pelear nuestras ridículas cifras con las de otras provincias, no me puedo resistir al leer unas declaraciones del coordinador del Grupo Parlamentario Socialista, Juan Francisco Serrano. Se trata de un político, diputado a Cortes y elegido para formar parte de la nueva dirección federal del PSOE, que nada más que por su juventud y por el futuro que se le adivina, del que me alegro, debería hacer un esfuerzo de mesura y no decir simplezas, ni remitirse para los males de Jaén a los gobiernos del PP, sin hacer una mínima autocrítica para no herir la inteligencia de los jienenses. Vamos que la responsabilidad de que Jaén esté como está se la adjudica a Rajoy y por extensión a todos los gobiernos de la derecha, hasta el mismísimo Franco si viene al caso. Serrano nos hace las cuentas del gran capitán y mete en los ridículos 107 millones que corresponden a Jaén en el reparto de la tarta, a capítulos de gastos que también los hay en el resto de provincias, es decir, pensiones, Ingreso Mínimo Vital, bono joven, etc., cuando lo que estamos demandando los jienenses son inversiones productivas, sobre todo en infraestructuras.
Es curioso lo de los parlamentarios socialistas, porque unos permanecen tan callados como los leones de las Cortes, es el caso por ejemplo de Felipe Sicilia, el otro ungido, que está a caballo entre Madrid y Sevilla, pero del que no sabemos ni qué ni cómo piensa del trato a Jaén, aunque me apuesto a que es el primero en ponerse a las órdenes de los jefes y en el primer tiempo de saludo. Cuántas ganas de que algún día cambie la ley electoral y se supriman estos privilegios y esta partitocracia que tanto daño hace a territorios como el nuestro. Y como ya he repetido en alguna ocasión, a no muy tardar nos enfrentaremos a los números andaluces, será presumiblemente a finales de noviembre, nuevos o prorrogados, porque Juanma Moreno insiste en que no habrá adelanto electoral, lo que pasa es que en política no hay que fiarse.
Mañana se celebra en el Ayuntamiento de Jaén el pleno en el que, entre otros asuntos, el equipo de gobierno tratará de sacar adelante su propuesta de acuerdo con la empresa Castillo para cerrar de una vez por todas la relación entre ambas partes. Tras la polémica de las últimas semanas, sobre todo a costa de la indemnización que ha de hacerse a la que ha sido concesionaria durante sesenta años, ahora viene el momento de la verdad, cómo se retrata cada grupo político en la instancia municipal. Supongo que a estas alturas si va a haber acuerdo ya debe estar abrochado, porque en caso contrario la solución es seguir prolongando la agonía y enfrentando nuevos problemas y tal vez de más difícil digestión tanto política como económica. También el Ayuntamiento tiene que reaccionar a la sentencia del Tribunal Constitucional en torno al impuesto de plusvalía. A perro flaco, todo son pulgas, si tiene que detraer unos millones, aunque sean pocos, ya sumará otro problema. La señora María Orozco parece que es buena encajadora, pero se le acumulan los asuntos en la Concejalía de Hacienda, entre ellos creo recordar que por estas fechas ya debía estar encima de la mesa un borrador de presupuestos.
Por último me gustó mucho el homenaje que la sociedad de Jaén dedicó en la noche del miércoles a Domingo Moreno Medina, un hombre de empresa, vinculado a las marcas cerveceras jienenses, empezando por El Alcázar, pero que en toda su trayectoria en Jaén ha sido y lo sigue siendo un personaje providencial muy presente en instituciones sociales y culturales. A sus 80 años y con una hoja de servicios impresionante, se puede afirmar con rotundidad que le acompañan todos los méritos para recibir el reconocimiento de toda la provincia, de hecho estuvieron representados numerosos estamentos, y es que da gusto ver que los homenajes, como debe ser, se hacen en vida. Por cierto, entre los asistentes se encontraba el presidente de la Diputación, Francisco Reyes, la autoridad representativa que se quiso sumar al acto. A Reyes se le podrá criticar lo que se quiera, las opiniones son libres, pero no hay un político en esta provincia que esté tan omnipresente como él, tanto en actos de la capital como por toda la provincia, públicos y privados, en días laborables o en fines de semana, y esto no ahora porque sean tiempos de ebullición política, sino que es siempre. Le he seguido la pista a su agenda en los últimos días por simple curiosidad y apabulla. Al César lo que es del César.
Foto: El pleno municipal ha de pronunciarse mañana, viernes, sobre el acuerdo con Castillo.