Un día el de hoy marcado por un cambio de tiempo que va a ser efímero, porque los partes meteorológicos anuncian de nuevo un fin de semana primaveral. Mientras se confeccionan las listas electorales, primero las de las los comicios generales y acto seguido de las municipales, se siguen celebrando los cuarenta años de ayuntamientos democráticos, especialmente la Diputación, aunque se han unido otras instituciones como la UJA. Está bien que haya debate sobre lo que ha supuesto este trayecto de cuatro décadas, aunque han sido pocos los que se han acordado de protagonistas de los inicios, abril de 1979, que es cuando los ayuntamientos y quienes accedían a ellos por toda la geografía provincial, protagonizaron un momento histórico cargado de ilusión y de ganas de trabajar por los municipios. Qué tiempos aquellos que tuvimos la suerte de vivir. Mañana por la tarde se anuncia un encuentro en Diario Jaén con algunos de los personajes que fueron protagonistas de aquella maravillosa aventura, entre ellos el primer alcalde de Jaén, Emilio Arroyo, y el primer presidente de la Diputación, Leocadio Marín.
Es buen momento para recordar que este periodo democrático ha permitido a la capital jienense contar con siete regidores, seis alcaldes y una alcaldesa, aunque hay que hacer la salvedad que dos de ellos repitieron. Este es el orden: Emilio Arroyo López, José María de la Torre Colmenero, Alfonso Sánchez Herrera, de nuevo José María de la Torre, otra vez Alfonso Sánchez Herrera, Miguel Sánchez de Alcázar Ocaña, Carmen Peñalver Pérez, José Enrique Fernández de Moya y el actual, Francisco Javier Márquez Sánchez. Cada uno de ellos ha dejado su impronta y es seguro que los jienenses tienen una opinión formada sobre estos responsables públicos. No es el momento de valorar las respectivas etapas, para lo cual tengo los suficientes elementos de juicio, porque las viví profesionalmente. Por otro lado sería injusto quedarse con los aspectos negativos de la gestión de cada responsable, porque como en todos los órdenes de la vida siempre hay luces y sombras. Creo que lo que corresponde, sobre todo, es agradecerles en su conjunto el tiempo que le dedicaron a la Corporación y a la ciudad. De todas maneras, como me he manifestado en distintas ocasiones públicamente, no tengo inconveniente en señalar que Emilio Arroyo fue un magnífico alcalde providencial para la ciudad de Jaén, especialmente en su primera etapa, desde 1979 a 1983, fue un ayuntamiento modélico, con todos los concejales y sus grupos volcados en la ciudad y es difícil olvidar aquel entusiasmo y todos a una para abrir un nuevo tiempo. Después si tuviera que destacar a alguna otra persona, me quedaría con Alfonso Sánchez Herrera, reconozco que tuvo momentos de dificultad, pero el personaje carismático y popular estuvo siempre por encima de las circunstancias, teníamos como regidor de Jaén al mejor relaciones públicas posible, un hombre muy querido, y lo sigue siendo.
Hoy, los ayuntamientos han cambiado mucho, en algunos aspectos, los menos, para mejor; en la mayoría de los casos, no tanto, han asumido muchas competencias y la economía no da para tanto. Ahí tenemos al Consistorio de la capital que por una deuda incontrolada, que está en el debe de sus últimos inquilinos de la Alcaldía, junto a sus equipos gobernantes, lastra posibilidades y expectativas de futuro. No han sido comedidos, y por tanto no se les puede ni siquiera aprobar la gestión porque la irresponsabilidad de entonces ha derivado en una situación de agonía crónica que amenaza con ser duradera. De hecho en un pleno de los próximos días se va a llevar la propuesta, que ya ha pasado por la Comisión de Hacienda, de solicitar 36 millones de euros con cargo al Fondo de Ordenación del Ministerio de Hacienda, con el objetivo de cancelar el total de la deuda a corto plazo. Se acaba un problema inmediato, pero la ruina se aplaza por hasta veinte años, según acabo de leer, con lo que la hipoteca que se deja a las corporaciones venideras sigue siendo una carga pesada. Es de esperar que alguna medida pueda iluminar en el próximo e inminente mandato para mejorar esta angustia.
De todos modos siempre que llego a este punto no tengo más que palabras de elogio para el concejal Manuel Bonilla, que ha sido la tabla salvadora del Ayuntamiento, no porque haya acabado con el agujero tan grande, porque el concejal no tiene una varita mágica ni puede hacer milagros, pero ha gestionado la economía con decisión y con muy pocas ayudas externas, salvo la disponibilidad de algunas entidades bancarias y el Ministerio de Hacienda cuando ha accedido a socorrerlo. Lo lamentable de este gravísimo problema es que quienes lo provocaron ni siquiera asumieron las advertencias de los altos funcionarios que tienen la obligación de velar por el cumplimiento de la norma. Pero ni siquiera eso ha frenado a algunos políticos que se propusieron, y no siempre lo lograron, castillos en el aire, días de gloria, y lo que consiguieron fue un daño irreversible que finalmente estamos pagando y pagaremos por mucho tiempo aún todos los jienenses.
Listas. El PSOE está siendo el más madrugador. Ya presentó su candidatura para las municipales, con Julio Millán a la cabeza y una lista más que renovada. El candidato aparece en los mupis, muy aparente, como él es, da una buena imagen, y desde hace semanas recorre los barrios, uno a uno, donde sabe que está el caladero de votos, y porque conoce que, con sus excepciones, los barrios han sido la asignatura pendiente de la gestión a punto de finalizar, a causa de la asfixia económica. De hecho mañana mismo se movilizan en el Polígono del Valle y lo sorprendente, con la que está cayendo, es que otros barrios no hayan hecho lo mismo, lo cierto es que casi todos han sido muy comprensivos con la situación del Ayuntamiento y esto debería ser agradecido por la Corporación en su conjunto y especialmente por el equipo de gobierno. También hay que reconocer, no deben dolernos prendas, que ante la dificultad, tiene mérito la tarea del concejal Juan José Jódar, es bien fácil gestionar cuando sobra el dinero y muy complicado cuando se dispone de lo mínimo y gracias en parte a la imaginación y a buscar debajo de las piedras. El caso es que el candidato a la Alcaldía por el PP y actual alcalde, Javier Márquez, tampoco es que esté parado, en los últimos días está recogiendo iniciativas para ultimar el programa y mantiene secretismo absoluto en relación con la candidatura, aunque algunos nombres sueltos están en la calle y se dan por incluidos, por supuesto el de Manuel Bonilla, que sería de nuevo, de repetir en el cargo, los pies y las manos de Márquez. El alcalde parece que no está dispuesto a hacer una gira por los barrios, cree que esa labor es inútil porque no se puede prometer todo, incluso lo que se sabe que no se puede cumplir, por tanto la opción es apostar por unas determinadas prioridades. ¿Cuáles? Pronto lo sabremos. A los demás les seguimos esperando, aunque en el caso de Ciudadanos me consta que desde hace meses, aunque se publicite muy poco, María Cantos y su equipo han tenido decenas de reuniones y entrevistas, con lo que el programa está prácticamente listo a la espera de que desde arriba le den el ok.
Los socialistas también van a ultimar sus candidaturas para las elecciones generales del 28 de abril este próximo fin de semana. Felipe Sicilia, como ya comentábamos hace unas fechas, parece claro que va a ser el elegido para encabezar la lista al Congreso, es un hombre de confianza de Reyes y además es valorado por el equipo de Pedro Sánchez, de modo que tiene la vía expedita. A Micaela Navarro le van a premiar su veteranía con un puesto en el Senado, su trayectoria y sus servicios a la causa le valen este reconocimiento, es de suponer que para poner fin a su carrera política. En el PP están sonando nombres, pero parece estar todo pendiente de efectuar un reparto entre candidatos para ayuntamientos y Diputación, y los que opten por Madrid, de nuevo saldrá por algún lado el pulso de todos conocido. Alguien ha escrito hoy en las redes sociales si todavía está Gabino Puche ‘defendiendo’ los intereses de Jaén. Pienso que ya no toca. Es más, alguien me ha contado que la secretaria general de Nuevas Generaciones, Ana González, que por cierto vale muchísimo y me alegro, le dijo en su cara a Gabino que ya era hora de dejar paso a gente de refresco.
Poco más. Manuel Fernández Palomino se encuentra vendiendo las fortalezas de “Jaén, paraíso interior” en la Bolsa Internacional de Turismo (ITB) de Berlín, uno de sus últimos viajes. Toda su vida se va a acordar de estos cuatro años tan intensos, en los que ha tenido que hacer compatible su tarea de portavoz socialista en el Ayuntamiento con una responsabilidad tan absorbente como la de diputado provincial de Promoción y Turismo. En el Consistorio ha contado con gente que le ha ayudado, por ejemplo, y no es la única, Mercedes Gámez, que es otra mujer, creo haberlo dicho ya, con una fuerza especial y dotada para la política, que espero demuestre su valía como parlamentaria andaluza. Fernández Palomino ha sido uno de los mejores responsables del área que dirige en el organismo provincial, un embajador permanente de Jaén, reconocido y valorado por quienes lo han visto desempeñar su cometido en tantos y tan variados escenarios y acontecimientos. Y hoy la Universidad de Jaén ha cerrado la conmemoración de su XXV aniversario al presentar el “Anuario. 25 años de universalidad”, y, una vez más, el rector que aspira a renovar y que renovará, Juan Gómez, se ha hecho acompañar de sus predecesores, Luis Parras y Manuel Parras. Un magnífico trío y además muy bien avenido.
Por último, hoy estamos celebrando el Miércoles de Ceniza, con el que en la tradición cristiana se abre el periodo de 40 días que precede a la Semana Santa. Se impone la ceniza y el sacerdote, como ha hecho esta noche el propio obispo en nuestra Catedral, repite la expresión, al tiempo que hace una cruz en la frente con la imposición de la ceniza sobre los fieles: “Memento homo, qui pulvis es et in pulverem reverteris” (Recuerda, hombre, que eres polvo, y al polvo volverás). La pura verdad, esta vida es pasajera.
Foto: Imposición de la ceniza.