La presión social, y solo la presión social, es la que ha conseguido meter a Jaén en la agenda de los políticos, por tanto que nadie se cuelgue medallas que no le corresponden. El último episodio ha sido el encuentro en el Palacio de la Moncloa entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el titular de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla. Políticamente es obvio que están muy distantes, pero la relación personal es buena, y también se nota en las imágenes que ayer se hicieron públicas de la entrevista. Por lo que a Jaén se refiere no ha sorprendido en exceso que entre los asuntos que llevaba en cartera el jefe del gobierno andaluz, figurara alguna relación a nuestros problemas. Hace unos días, en El Confidencial, se podía leer que la Junta pretendía solicitar del gobierno central que activara las actuaciones ferroviarias pendientes, y en esa información no se aludía a las expectativas de nuestra provincia. En consecuencia no es sorprendente que Juanma Moreno lo haya incorporado e incluso le diera prioridad, sabedor de que en este momento en Jaén se miran con lupa todos los aspectos de la atención de las administraciones con este territorio, sobre todo la sociedad civil y más en concreto la plataforma ciudadana “Jaén Merece Más”, que se ha convertido, y muy bien que está, en el vigía permanente de las continuas afrentas. Lo dicho, Moreno ha pedido a Sánchez que no se olvide del ferrocarril de Jaén.
Este gesto que es normal en un presidente del gobierno de la comunidad, ha sido muy mal recibido en el PSOE de Jaén, actuando como perro del hortelano, que ni come ni deja, aunque para decir verdad la evidencia ha hecho que se ponga las pilas, recordemos la reciente visita del ínclito ministro Ábalos y algunos de sus compromisos. Francisco Reyes, el secretario provincial de los socialistas, presa de los celos, ha considerado una “desfachatez” que Moreno interceda por el tren para Jaén. De un tiempo a esta parte el blanco de todas las iras del PSOE provincial es el presidente de la Junta, pienso que en parte motivado porque conocen como nadie las encuestas y la valoración favorable que los andaluces le dan, incluso militantes socialistas, y naturalmente este es un obstáculo para los planes más ambiciosos con Juan Espadas a la cabeza, de recuperar San Telmo. Reyes, que quiere barrer para casa, que también lo veo natural, aunque equivoca el tiro, culpa en parte a Moreno Bonilla, porque reitero que es desde hace semanas su diana, de los siete años de gobierno de Rajoy, que para él fueron los peores para el ferrocarril de Jaén, no hace la menor concesión a la autocrítica y considera jauja toda la etapa socialista. Un problema de memoria histórica, sin duda. Pues bien, anuncia el también presidente de la Diputación que en breve y gracias a una lanzadera se recortará el viaje a Madrid en torno a 23 minutos, algo es algo, y a medio plazo, sin concretar, un by-pass permitirá que el viaje se quede reducido a las tres horas que se vienen demandando como la duración normal de un viaje entre las dos ciudades.
Donde no disimula el malestar que le causa la gestión presidencial es cuando vuelca toda la euforia tan propia del PSOE de Jaén, que ni ellos mismos se creen, porque hay que recomendarles un tono de moderación y humildad, y sobre todo, asumir las responsabilidades que le correspondan, no digo más, pero sí las que les afectan. Pero no, dice Reyes: “Estamos hablando de las mejores noticias ferroviarias que ha recibido la provincia de Jaén en los últimos diez años”. No son malas noticias, todo lo que suponga un avance es positivo, pero que quede claro que si no llega a ser por la presión social, la ciudadana antes citada, también la política y la de los medios de comunicación, entre otros, tales logros, si es que llegan a producirse, que lo celebraremos, lo más probable es que no existieran.
Finalmente hay una sola manera de ganarle el terreno a Moreno Bonilla, del que no pertenezco a su club de fans, pero reconozco que tiene buen talante, es moderado y no parece estar tan encantado de haberse conocido como el presidente con el que se reunió ayer. Esa única manera es lograr del Gobierno de España que demuestre con hechos que es más activo y ofrece más a Jaén que la propia Junta de Andalucía, y además tiene asuntos suficientes para ponerse a la tarea. Tampoco pretendo que la Junta se vaya de rositas, ya han pasado dos años y ya no es tiempo de predicar, tiene que dar trigo. No le pedimos que haga en cuatro años lo que no se hizo en casi cuarenta, pero ahora mismo entiendo que ya acumula déficit en su gestión referida a Jaén, entre otras cuestiones respecto a la ITI donde los dos gobiernos se han retratado a base de bien, pero a ese lamentable episodio ya volveremos. Ahora se trata de celebrar que Jaén se ha ganado a pulso estar en las agendas políticas, y desde luego si hay algo claro es que empieza a notarse.
Foto: Pedro Sánchez y Juanma Moreno, reunidos ayer en La Moncloa, hablaron de Jaén.
