Llegó el día D y la hora H y si no mueve ficha la portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, María Cantos, que ha sido la principal inspiradora e impulsora de la candidatura para Jaén del Plan Colce, y la que consiguió meter en el mismo barco a toda la sociedad, que no se olvide, seguramente le hubieran llovido las más duras críticas. Finalmente ha hecho lo que anunció desde el primer momento y, por cierto, lo que clama la ciudadanía, lo que llama la atención es que la responsabilidad de algo tan normal como pedir explicaciones por la vía judicial, ya que desde el Gobierno no han sido capaces de hacerlo por la vía política, no sea asumida, al menos por el momento, por el conjunto de la Corporación, ya que lo que está en juego es la defensa de los intereses de la ciudad. Ahora bien, dicho lo anterior, que va especialmente dirigido al grupo PSOE, creo que es obligado que para mantener la unidad que se propugna y que ha existido en todo este tiempo, se dé a conocer al resto de grupos políticos representados en el Consistorio información exhaustiva del expediente tal y como lo han demandado hoy de manera conjunta PP, Adelante Jaén y Vox, y también hay constancia de que individualmente lo ha hecho el portavoz del grupo del Partido Popular, Manuel Bonilla, que iría a la vía judicial pero si se dan unas determinadas condiciones. Estas tienen que ser las reglas del juego.
Por cierto, Bonilla demanda de Ciudadanos los informes jurídicos oportunos que garanticen que teniendo responsabilidades en el equipo de gobierno, la ley le permite la interposición de acciones judiciales y en todo caso la propuesta sea elevada al pleno. Esto es así porque el grupo de Ciudadanos, como cualquier otro, tiene que atenerse a la legalidad vigente. Todos juntos o no, pero previa información exhaustiva del contenido del expediente para tener la seguridad de que donde se van a meter no es un precipicio, y por cierto lo han demandado anteriormente al alcalde y no se les ha respondido. No se puede pedir un apoyo sin ofrecer lo mínimo, documentación. En esto, como en la mujer del César, no basta con serlo, sino que hay que parecerlo. En algo sí hay general coincidencia, en saber toda la verdad del Plan Colce. Yo también me sumo a esa lista. Nos habíamos entusiasmado por una causa justa y tenemos necesidad de conocer quién nos ha robado esta ilusión y si se va a salir o no con la suya, aun temiendo lo peor.
Creo que esta acción judicial debe ser secundada por todo el pleno, porque, para los que tengan algún reparo de creer que hacen daño a sus siglas, deben tener en cuenta que si alguien ha fallado a Jaén es el Gobierno de la nación, porque han pasado veinte días del “dedazo” a Córdoba y en una expresión sublime de deslealtad no han tenido el mínimo respeto institucional de trasladar a Jaén por parte del Ministerio de Defensa o quien se estimara oportuno, una respuesta contundente y aclaratoria, lo cual hace pensar que no existe tal respuesta y que los pasos que en estos veinte días se han dado con respecto a la base logística, han sido como las declaraciones que han ido conociéndose por los medios de comunicación, contradictorias, unidas a mentiras o a medias verdades, pero en todo momento ha sido elocuente el desprecio a Jaén. ¿No ve motivos el alcalde y su grupo para reclamar lo que en justicia le corresponde a Jaén, una explicación, saber de pe a pa los motivos? Ni siquiera sabemos lo que vía partido le han trasladado, porque no lo han dicho, simplemente hemos visto que los responsables públicos han modulado su ardorosa reacción inicial, no se sabe si porque les han hecho valer la disciplina férrea de partido o porque les han convencido con argumentos al tiempo que han demandado voto de silencio. Pues el pueblo les demanda transparencia y lealtad.
La posición del grupo de concejales de Ciudadanos, con María Cantos a la cabeza, me parece un acto valiente y de rechazo absoluto a la resignación a la que siempre estuvo abonada Jaén en su trato con las administraciones. Ella misma ha dicho que nadie dramatice, al tiempo que ha lanzado un mensaje muy claro a instituciones en el sentido de que se equivocarían si por esta decisión de acudir a los tribunales cogen el camino de seguir perjudicando, todavía más, los intereses de Jaén, echando para atrás proyectos e inversiones. Cantos, por si fuera poco, ha vuelto a calificar de “excelente” el trabajo de Jaén, dispuesta por tanto a echarlo a pelear con cualquiera. Ir a los tribunales es, en efecto, un derecho que asiste ante las dudas planteadas y porque, también hay que decirlo, desde Jaén se considera que la viabilidad del Colce está más que demostrada, pero los terrenos de Córdoba plantean interrogantes y además necesitan más tiempo para estar disponibles, de modo que la señora Margarita Robles, cada vez que se ha referido en medios de comunicación, nunca directamente con Jaén, a este proyecto, no ha hecho más que ahondar en la humillación a Jaén con afirmaciones que no se corresponden con la realidad.
Si algo ha exhibido hoy María Cantos es arrojo y libertad de movimiento, ha hecho realidad el principio de que su grupo accedió a la aventura política para defender los intereses de Jaén, y algunos, sobre todo su socio de gobierno, tendrían problemas para demostrar el mismo grado de adhesión, por eso la portavoz de Ciudadanos les ha pedido que se unan, “o que no estorben”, ha agregado. Tampoco ha tenido reparo en valorar la postura de la Junta, que ha ofrecido el mismo apoyo a Jaén que a Córdoba, con un matiz, que en el caso de Jaén estaban por medio los fondos ITI que le corresponden, con lo que en palabras de la segunda teniente de alcalde de Jaén, son conceptos distintos igualdad y justicia, más concreto aún, ha habido un agravio con Jaén.
En resumidas cuentas, el asunto está en mano de profesionales del derecho que serán los encargados de valorar el procedimiento a seguir, con la pretensión de que se inicien las actuaciones lo antes posible. No se descarta siquiera la opción de medidas cautelares. Con estos detalles se pone de relieve la sana ambición que era el Colce, lo que María Cantos ha dicho: “El Plan Jaén era el Plan Colce”. Y ha añadido que “en el caso de que se nos convenza con criterios objetivos, nos callaremos y daremos la enhorabuena a la otra candidatura”. Por lo que respecta al tema más espinoso, la relación del grupo de Ciudadanos con el PSOE con quienes conforman el gobierno municipal, parece que todo depende de cuál sea la actitud que muestre el grupo que lidera Julio Millán, es decir, no hay riesgo alguno si defienden “los intereses de Jaén”, si se desvían de ese objetivo, y actúan al dictado o como correa de transmisión del partido o del gobierno, entonces ya sí hay un problema. Lo que ocurre es que si se rompe el pacto de gobierno otras posibles alternativas tendrían escasa viabilidad dado que, por ejemplo, Ciudadanos rechaza de plano un acuerdo con el grupo de Vox y PSOE y Adelante no suman, lo cual es otra dificultad añadida por si ya hay pocas, y la alternativa de dejar gobernar al PSOE en minoría tiene sus inconvenientes, pero…el tiempo dirá.
Lo que sí es cierto, por lo menos para la gente de a pie que no está tanto en la política sino en seguir apoyando a Jaén en este momento histórico, que lo ha hecho en la pasada manifestación y en las caceroladas, es que todos estos argumentos son munición para seguir manteniendo viva la llama de la protesta, ahora con el horizonte puesto en Despeñaperros para que sigamos haciendo ruido y los poderosos de arriba no tengan más remedio que claudicar, porque hasta el momento han tenido la callada por respuesta y esa actitud es despreciable y soberbia y no merece por tanto más que pagarle con su misma moneda, el desprecio.
Foto: María Cantos, en su comparecencia para anunciar medidas judiciales, acompañado por los concejales del grupo de Ciudadanos.
