Ha terminado el congreso regional de los socialistas andaluces, y como antes había ocurrido con el federal, la amplia representación jienense ha vuelto con buenas sensaciones, porque finalmente y tras este proceso que culminará en breves semanas con los cónclaves provinciales, se recompone una fuerza política que quedó seriamente tocada desde el momento en que se celebraron las últimas elecciones andaluzas con los resultados ya conocidos, y casi todas las miradas señalaron como responsable a Susana Díaz, nadie más quiso hacer autocrítica, y por esta razón se inició la operación acoso y derribo hacia la expresidenta y exsecretaria, que, curiosamente no ha terminado tan mal como algunos esperaban, recibió un sonoro aplauso del congreso del fin de semana, está bien instalada a cuerpo de reina, en el Senado, y en los ratos libres se pasea por las televisiones como tertuliana, opinando de lo divino y de lo humano, porque los tertulianos parece que saben de todo, aunque a veces cuando hablan dan ganas de apagar el televisor.
Los socialistas andaluces, con Juan Espadas a la cabeza, ya oficialmente y con todos los honores, nuevo secretario general del PSOE andaluz, tiene como objetivo prioritario recuperar el Palacio de San Telmo (ya lo dijo Pedro Sánchez: tú en San Telmo y yo en Moncloa), pero mucho tendrían que cambiar las cosas, porque en este momento las encuestas favorecen sobre todo al Partido Popular y a Juanma Moreno, de modo que en los pocos meses que parece que faltan para la cita electoral el PSOE se la juega si tiene tanta euforia para rebasar esas expectativas, pues el jefe del ejecutivo acaba de reconocer que en febrero decidirá si convoca o no, va a depender de la suerte que corran los presupuestos para 2022 y las previsiones son bastante pesimistas.
Los socialistas de Jaén, que fueron a Madrid al congreso federal con una unidad forzada por las circunstancias y pese a todo no se les dio mal, sobre todo al incorporar a dos jienenses en la dirección del partido, uno, Felipe Sicilia, como premio a su lealtad incondicional a Sánchez, de hecho lo mandó a la operación relevo en Andalucía mientras buscaba a un candidato idóneo, que resultó ser Juan Espadas, y él hizo de avanzadilla, para provocar la salida de Susana Díaz; el otro es Juan Francisco Serrano, que es joven y que apunta maneras, pero sigue siendo tan complaciente como todos, eso no lo remedia nadie porque es una epidemia en los partidos. Pues bien, los socialistas jienenses ahora han vuelto a la cita de Torremolinos, pero esta vez han acudido con los deberes hechos, es decir, han pacificado la organización, en la que había tomado cartas de naturaleza el debate de la continuidad o no de Francisco Reyes al frente de la secretaría general, por cierto situación muy parecida a la que frente al nuevo liderazgo andaluz se fraguaba en el resto de las provincias. En el caso de Jaén tras unas cuantas reuniones, unos mediadores y un esfuerzo de unidad, fue posible fraguar un acuerdo que consistió en una solución salomónica, Reyes se comprometía a incluir como número dos en su lista de diciembre al alcalde de Marmolejo, Manuel Lozano, único militante que aspiraba a presentar una lista alternativa para renovar el PSOE de Jaén. De esta manera se cosían las costuras que llevaban algún tiempo provocando alguna que otra tensión, y al fin Reyes pudo respirar tranquilo y ha ido a Málaga con la sensación plena de liderazgo, como en todos estos años.
De lo que no cabe duda es del respeto orgánico que se tiene al PSOE de Jaén tanto en Madrid como en Sevilla a causa de sus resultados electorales, una cita tras otra, lástima que la provincia y sus necesarias inversiones no se beneficien proporcionalmente a lo que debería representar este dato, porque la realidad es que en efecto, el socialismo de la provincia es poderoso y mantiene su hegemonía, pero no se puede hacer una traslación al ámbito de poder del PSOE jienense ante las administraciones que gobierna, verbigracia el señor Pedro Sánchez, es decir, a utilizar ese patrimonio para reivindicar y exigir en el nombre de esta provincia,aunque esto no es nuevo, viene de atrás. He aquí la disfunción en la que se mueve nuestro socialismo desde hace bastantes años. Los jienenses nos preguntamos para qué queremos que sea tan fuerte si al final la política para lo que sirve es para transformar la sociedad y me resisto a pensar que no quieren, más bien creo que o no pueden o no les dejan, pero con su silencio cómplice, todo hay que decirlo.
Vayamos a los resultados para las personas en el congreso regional del fin de semana. Iba a poner que ha nacido una estrella, pero Ángeles Férriz, ya lleva algún tiempo instalada en el firmamento socialista andaluz, a pesar de los pesares, porque ahora ha llegado su irresistible ascensión al liderazgo, pero también ha pasado por situaciones complicadas, precisamente por su valía, en tiempos de Susana Díaz, lo mismo trató de encumbrarla que de pronto le quitó los galones, en un estado compatible con un ataque de celos. Ahora se le hace justicia. Férriz tampoco encontró en según qué situaciones el cariño de su agrupación, de hecho he estado mirando para ver una imagen en la que estén solos ella y Paco Reyes, simbolizando que en ambos se encarna el nuevo tiempo del socialismo jienense, él como secretario general y ella como esa número 2 con vocación de ejercer su tarea y su responsabilidad. Y ya se sabe la fuerza y el poderío que puede tener un número 2 cuando se le dan alas. Conocemos de sobra historias de segundos para escribir varios libros. De manera que si el PSOE tuviera oportunidad de llegar de nuevo al gobierno, veríamos a la carolinense con mando en plaza.
Me alegro mucho por ella, porque he conocido su trayectoria desde que se inició en política y con independencia de las coincidencias y las discrepancias, que esto es lo menos importante, he de reconocer que me agrada el ascenso político de las mujeres, pero en este caso lo simbolizo en Ángelez Férriz, en su fuerza y en su vitalidad, tiene una energía a prueba de bomba, cualquiera lo puede advertir, es muy socialista, y frente a un discurso más templado e institucional del casi jienense Juan Espadas, está el tono firme, punzante, incluso provocador, que no deja a nadie indiferente, de quien ya ha dado muestras en el Parlamento andaluz de su empuje desde que se hizo cargo de la portavocía del Grupo Parlamentario Socialista, un cañón cada vez que sube a la tribuna a debatir con Juanma Moreno o con quien sea menester. Esta buena nueva le llega en un buen momento y ojalá que dure, pero sobre todo hay que pedirle que ahora que está ejerciendo un papel protagonista, sea consciente de que en cada paso que ha dado en política tiene un referente que se llama Jaén. Y ahora más que nunca, todo el PSOE provincial la aplaude, como lo que es, una triunfadora, la imagen viva del animal político. De hecho está en una nube, ha recibido estos días, por lo que veo en las redes sociales, centenares de adhesiones, tiene al partido con ella y con independencia de Reyes en este momento para el PSOE de Jaén, Férriz es el referente. Su apoyo incondicional durante la campaña a Espadas y su propio carisma le han puesto en el pedestal. Solo le pido una cosa: Ángeles, no te olvides de Jaén.
Junto a ella el congreso regional ha tratado de contentar a los territorios y en el caso de la provincia de Jaén me da la impresión de que ha habido café para todos, o para casi todos, de manera que han debido hacerse malabarismos para cerrar el círculo. Entran en la ejecutiva regional seis jienenses, entre ellas Mercedes Gámez en el área de Igualdad. Mercedes, lo he dicho en alguna otra ocasión, y no siempre estoy de acuerdo con ella, es otro valor en alza, fue gran concejal en el Ayuntamiento de Jaén, en la oposición y a dúo con Manolo Fernández, y ahora da la cara en el Parlamento andaluz y está en la calle. Lo hará bien, seguro. Por lo que se refiere al Comité Federal, donde estar presente en él es para cualquier socialista como un timbre de gloria, porque es de él de donde emanan los mensajes políticos, han incluido a Micaela Navarro, al quitarle el puesto de presidenta, donde le releva otro peso pesado, el granadino Manuel Pezzi, así que a Micaela no la jubilan. También van al Federal, junto a Francisco Reyes, que ya fue elegido en Madrid, Paqui Medina, que es presidenta del PSOE de Jaén, aparte de vicepresidenta primera de Diputación; Jacinto Viedma, diputado andaluz y secretario de Organización; Manuel Fernández Palomino, senador, y Manuel Lozano, alcalde de Marmolejo al que se agradece su renuncia en favor de la unidad. El resto de premios y reintegros son los nombres que se han incluido para el Comité Director de Andalucía. El que no esté en algunos de estos órganos tendrá que esperar al congreso provincial, porque en él terminará el reparto de cargos.
Al final en ese café para todos al que me refería, habrá sitio para muchos más, es cuestión de no desesperar, que diciembre está a la vuelta de la esquina. Y luego están los alcaldes y alcaldesas, junto con los diputados provinciales, que en la mayoría de los casos bastante tienen con asumir responsabilidades, aunque a nadie le amarga un dulce. Ya puestos, participar del engranaje orgánico, el motor que mueve la vida de los partidos, es la mayoría de las veces el mejor banco de pruebas para saltar a los papeles institucionales. Como resumen, soy un firme defensor de que los partidos que se mueven en el tablero político, sobre todo los que tienen opciones de gobierno, tengan fuertes sus estructuras, cuanto más mejor, porque solo así les podremos pedir y exigir que se vuelquen con Jaén, y en este momento me refiero al PSOE, ser un granero de votos no puede quedarse en una satisfacción partidaria, sino en un sólido y exigente compromiso con esta tierra que necesita a todos los partidos, nadie sobra para llevar en volandas a Jaén hacia el lugar que por dignidad le corresponde. Cuánto me gustaría que todos los partidos hicieran un voto de servicio inquebrantable a Jaén.
Foto: El nombre más repetido en el PSOE de Jaén durante los últimos días, y lo que quede, es el de Ángeles Férriz. (EUROPA PRESS).