Por ANTONIO GARRIDO / Acudí con gusto en la noche del miércoles a la presentación del libro de José Agustín González Romo, en la Real Sociedad Económica de Amigos del País, a la que orgullosamente pertenezco, y para nada me extrañó el amplísimo poder de convocatoria, porque los actos en esta institución cultural se cuentan por masivas afluencias para lo que suele ocurrir en otros escenarios, bien es verdad que de un tiempo a esta parte el panorama en general ha mejorado, hay más oferta pero también más demanda, aunque el caso de La Económica es único, excepcional.
El lleno hasta la bandera no sabría muy bien explicar si se debía al libro, al autor o a ambos, o, dicho de otra manera, a la política o a la literatura. Fue un acontecimiento ágil, perfectamente moderado por el periodista y amigo de hace muchos años, de hecho fuimos compañeros en Ideal y hoy es el delegado en Andalucía de #elEconomista, un periodista solvente, de Jabalquinto por más señas, Juan Esteban Poveda.
Luego de unas palabras de presentación del director de La Económica, Antonio Martín Mesa, siempre deferente con quienes eligen el faro cultural de la ciudad de Jaén por excelencia, Juan Esteban Poveda hizo de gran maestro de ceremonias para dar protagonismo tanto a José Agustín González Romo, el autor, como al escritor Emilio Lara, que le acompañó en esta presentación en sociedad, ya que firma el prólogo. Poveda, como buen periodista que sabe muy bien su oficio, lanzó varias preguntas a quienes le acompañaban en el escenario, incluso con la socarronería que le caracteriza, y aprovechando que González Romo está ya en la aventura de un tercer libro (el primero tenía por título “Una vida en la maleta”), también sobre sus paseos por Jaén, anunció, mientras le daba a sus palabras un aire de suspense, algo así como que ya se puede decir lo que todo el mundo está esperando…”, y los asistentes se creyeron que se trataba de la nominación oficial de González Romo para la Alcaldía de Jaén por el PP, pero en realidad era la confirmación de que, en efecto, “habrá un tercer libro”. El público irrumpió en aplausos, que es tanto como decir que se resigna a que los dirigentes del PP decidan los tiempos para hacer público lo que parece ser un secreto a voces. Pero solo quedan seis meses para las elecciones. Menos mal que el presunto candidato sí ha sido madrugador y tiene los deberes medio cumplidos.
Porque hemos dicho que el salón de La Económica estaba lleno, no cabía un alfiler, pero el público asistente era muy variado, ciertamente se hizo notar una amplia representación del PP, sobre todo concejales, aspirantes a serlo, algún que otro cargo institucional, pero igualmente había muchos amigos que arropaban al autor del libro, y, por supuesto, estaba su familia.
La verdad es que pasamos un rato muy agradable. Vengo siguiendo a Agustín González desde hace algunos meses, cuando se empezó a barajar su nombre como alcaldable, entonces dije que era muy conocido en su casa a la hora de comer. Pero quien le empujó como candidato le hizo reaccionar como pocas veces se ha visto en este tipo de experiencias políticas. En pocos meses ha hecho un máster de jaenerismo, aprobado sin duda con la máxima nota, cum laude, el libro es una muy buena prueba de ello, pues aunque no naciera en Jaén sino en Sevilla, no es menos verdad que su vida ha estado ligada personal y profesionalmente a la capital del Santo Reino y el libro todo es una declaración de amor a Jaén. Hace tiempo me empecé a interesar por Agustín persona cuando le leí en las redes sociales: “Un líder es aquel que demuestra que lo imposible es posible y lo hace enseñando el camino con su esfuerzo y ejemplo”. Pues este Agustín al que me estoy refiriendo, hizo una presentación sencilla y sentida de su obra, en la que hace protagonista a su perro Bruce, con el que recorre la ciudad normalmente los domingos, aprovechando las primeras horas del día, hasta el momento de los churros. Sus paseos con Bruce empezaron a hacerse populares en las redes sociales y desde ellas vendieron la mejor imagen posible de esta ciudad. Dice Agustín González en su introducción: “Ha sido fácil asumir este agradable compromiso. Bruce pone la sabiduría y el porte y yo me entretengo en traducir sus versados ladridos y dar forma al propósito de dar a conocer nuestra propia historia. Quizás así aprendamos a respetarla, valorarla y amarla, el paso previo para progresar y hacer de Jaén la ciudad que siempre ha querido ser, en nuestras manos está el conseguirlo”.
También me sorprendió agradablemente del autor del libro su sencillez, la facilidad que tiene, y se le nota, para las relaciones sociales, y sin duda capacidad e inteligencia. Dio respuesta a cada pregunta que le era formulada, pero me quedo sobre todo con algunas interrogantes referidas a su concepción de la responsabilidad pública, por ejemplo, el cargo de alcalde. Le oí decir, y me sonaba a música celestial, que un alcalde debe tener autonomía, entiendo que se refería a no meter el partido en el Ayuntamiento, como en ocasiones ha ocurrido, y tras esta declaración de intenciones, ya me extrañó menos que apostara por una capitalidad fuerte para Jaén y que además de las enormes fortalezas de la ciudad se detuviera en debilidades con el reconocimiento de que todas las administraciones tienen que operar para cambiar el rumbo, con especial incidencia en las infraestructuras de comunicaciones. Lo dicho, además del jaenerismo militante que es el libro, que recomiendo, en el tú a tú, además da pie para hablar de lo divino y de lo humano, pero, sobre todo, porque se lo oí decir varias veces, porque Jaén es un sentimiento, una manera de ser, un orgullo.
Cuenta con bastante consenso en torno a su persona, empezando por la dirección del PP, que no ha dudado en ofrecerle respaldo en tantas ocasiones, como es de dominio público en los últimos meses, pero tal vez sería demasiado afirmar que en torno a él existe consenso generalizado. También, nunca llueve a gusto de todos, me consta cierta contestación, pero es más un problema de partido, de participación de los afiliados en los procesos internos, incluso hay algunos puristas, pienso que no demasiados, a los que les gustaría otro tipo de candidato, más derechizado, porque él proyecta una imagen de moderación y su compromiso político no es de pedigree, lo cual no le quita mérito porque quienes lo conocen de cerca lo definen como una persona muy comprometida y capaz, amigo del diálogo antes que de la confrontación y muy de fiar.
No voy a entrar en pronósticos políticos, el 28 de mayo de 2023 el pueblo de Jaén votará en libertad, pero sí puedo señalar que en el caso de que Agustín González tuviera la opción de ser alcalde, posee lo fundamental, méritos y capacidad suficiente para serlo. Y pasión por la ciudad soñada, porque como él mismo expresaba, lo que empezó como un acto de amor, ha terminado en esos 40 relatos, con un afán reivindicativo, desear que Jaén se convierta en una ciudad ideal, orgullo para sus vecinos y visitantes. Y por lo que respecta a su mascota, Bruce, su comportamiento, como cabía esperar, fue el adecuado, asistió al acto como un invitado más, en este caso privilegiado, pero sí, estuvo a la altura de las circunstancias.
En cuanto a la intervención del escritor Emilio Lara, fue, una vez más, como nos tiene acostumbrados, una apasionante y magistral lección de historia, sobre todo de la local, apoyándose en algunos capítulos del libro presentado. Aludió el autor de “Centinela de los sueños”, que en un par de meses tendrá en la calle su nueva novela, al paralelismo que presenta Agustín González con “Bruce” a la que un día, hace varias décadas, presentó Antonio Gala en sus “Charlas con Troylo”. Reivindicó que asistíamos a un acto político, (de “polis”) porque política es todo, pero especialmente lo que hizo el destacado novelista jienense fue hacer un canto a Jaén sin paliativos, en un escenario rendido a su discurso, centrándose en todos sus valores, con el convencimiento de que tiene potencial suficiente para convertirse en “el Málaga del interior”, valorando el paisaje y el paisanaje de la ciudad, deteniéndose en los monumentos y lugares más representativos, y señalando del libro que es, además, un cargamento de autoestima. Solo le faltó a este acto culminar con el “Himno a Jaén”, pero Emilio Lara, elevado por el tono de exaltación de la capital en una tarde redonda, no quiso que terminara el encuentro sin que él gritara y el público diera contundente respuesta al “Viva Jaén”.
Después una interminable firma de ejemplares, el autor de este libro, a falta de que le señalen de modo oficial como candidato, que debe llegar pronto, ha tenido su presentación en sociedad de la mejor manera que hubiera deseado. En un marco espléndido, con la literatura como compañera de viaje y con un público entregado, en el que el verdadero protagonista quiero entender que fue esta maravillosa ciudad en la que tenemos la dicha de vivir.
LAS 40 LEYENDAS
El libro consta de 40 leyendas, incluidas en los apartados Historia y Leyendas; Monumentos, calles y plazas; Hombres y mujeres de Jaén (o casi); Emprendedores, genios y enamorados de Jaén, y Domingos estivales. Esta obra está acompañada de abundante y significativo material gráfico, que en este caso se trata de un complemento muy de agradecer.
1.-El encuentro de Isabel y Colón que la historia cambió.
2.-Fernando IV, en la Diputación se cumplió su maldición.
3.-En San Ildefonso del ladrón solo queda el cabezón.
4.-De Jaén ni poyas (con y griega pero sin rima).
5.-El padre Canillas, el Arco de San Lorenzo y sus patillas.
6.-Desde la Catedral nuestra mona te mira remolona.
7.-Cuando el Pósito se calma, rezan en pena sus almas.
8.-Para en San Lucas poder bailar, su origen has de averiguar.
9.-Si quieres temblar la Casa del Miedo has de visitar.
10.-De La Magdalena es el lagarto que nunca quedaba harto.
11.-De Las Almenas a los rincones, la casa de seis puntas y muchos galones.
12.-La Plaza de Las Batallas, con poco de concordia pero mucho de nuestra historia.
13.-Los Jardines de Jabalcuz, un paraíso con o sin luz.
14.-El Lagarto de la Malena por su Jaén se pasea con más gloria que pena.
15.-El Barrio del Almendral bien merece ser universal.
16.-Plaza de Los Naranjos a vida y tiempo sabe.
17.-La Casa del Reloj por fin hace tic toc.
18.-El Castillo de Santa Catalina siempre huele a sardina.
19.-La Mella siempre luce bella.
20.-Millán Millán de Priego y su pilar del Pilar del Arrabalejo.
21.-Jaén sin la Cruz de su Castillo estaría muda, coja y sin brillo.
22.-”El Femenino” y su ilusión por vencer a la desidia.
23.-Vía Verde que te quiero Vía Verde.
24.-Amalia López Cabrera.
25.-Rafaela Santamaría.
26.-El payo Juan Manuel.
27.-Andrés de Vandelvira.
28.-El Condestable Miguel Lucas de Iranzo.
29.-Rafael Porlán.
30.-Justino Flórez Llamas, Daría, Amelia y su Teatro.
31.-La Familia Balguerías.
32.-Las tres generaciones de Ruiz (Romero, Alcázar y Córdoba).
33.-El maestro Juan Eslava Galán.
34.-Cuando Lorca se enamoró de Jaén.
35.-Casa Paco, Kiosco Las Palomas y el síndrome jienense del Teatro Cervantes.
36.-Desatranques Jaén.
37.-El pantano de La Fernandina.
38.-El pantano de La Bolera.
39.-El pantano del Tranco.
40.-El pantano del Yeguas.
¿Quién es José Agustín González Romo?
Nacido en Sevilla (1974), es licenciado en Derecho por la Universidad de Jaén y pertenece al Cuerpo Superior de Técnicos de la Administración de la Seguridad Social desde 2003. Hasta ahora, ha sido, en la anterior etapa de gobierno andaluz, secretario general de Empleo y Trabajo Autónomo en la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, y en la actualidad es director general de Consumo en la Consejería de Salud y Consumo. Ha sido consejero de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en Rabat (Marruecos) y director provincial de la Tesorería General de la Seguridad Social en Jaén, vocal asesor en la Secretaría de Estado de Seguridad Social y subdirector provincial de Jubilación, Supervivencia y Convenios Internacionales en la Dirección Provincial del Instituto de Seguridad Social en Jaén, entre otros cargos directivos públicos. Posee diversos cursos en materia de Derecho, Trabajo y sistemas de Seguridad Social de la Unión Europea, además de la Cátedra Jean Monet de Derecho Comunitario, por la Universidad de Jaén.
Foto: Agustín González Romo, en el escenario de La Económica con su inseparable Bruce, entre el periodista Juan Esteban Poveda y el destacado escritor jienense de novela histórica, Emilio Lara.
