Por ANTONIO GARRIDO / Se acumulan los procesos electorales. A pocas semanas vista, primero la convocatoria electoral para el Rectorado de la Universidad, y después, como seguramente ya conocen, la cita con las urnas para elegir a las personas que nos tienen que representar durante los próximos cuatro años en los ayuntamientos. La batalla de la UJA la van a librar cinco catedráticos, Adoración Mozas Moral, Encarnación Medina Arjona, Nicolás Ruiz Reyes, Juan Manuel Rosas Santos e Ignacio Benítez Ortúzar. El 4 de mayo es el día elegido para votar y es bastante previsible que haya una segunda vuelta, el 17. He asistido a la primicia, en el Foro Jaén de Opinión y Debate, de la exposición de los rasgos definitorios de cada una de las propuestas, y en las coincidencias y en las discrepancias valoro por un lado el paso que dan de valentía y compromiso, y después que tengan cada uno de ellos un proyecto para seguir haciendo más grande a nuestra Universidad, algo que es incompatible con el maltrato económico, como dijo alguno de los aspirantes, y comparten el resto, en Jaén no se va a permitir que alguien tenga el propósito de convertirnos en universidad de segunda. Y para eso está también la sociedad civil, una Plataforma Ciudadana en Defensa de la UJA, que ha cumplido un año, que el 7 de abril de 2022, junto con el puñetazo sobre la mesa del todavía rector, paró en seco la que era una clara afrenta para Jaén y que en este momento crucial, cuando se negocia un nuevo modelo de financiación, tiene más sentido que nunca para estar vigilante y doblegar cualquier riesgo. Nadie va a jugar con los intereses de Jaén, ni más que nadie, pero tampoco menos que nadie. Han pasado treinta años de la creación de la UJA, se ha hecho mucho en ella, pero nos tiene que durar y hay que engrandecerla dentro y fuera del Campus porque la Universidad pertenece a Jaén.
Y luego está el otro proceso electoral, este ya de mayor dominio público, porque se trata de los concejales y concejalas que elegiremos el 28 de mayo, de entre los que saldrán los alcaldes y alcaldesas que regirán nuestros pueblos y ciudades. Es curiosa la observación de la todavía precampaña, donde los poderes exhiben su fuerza, no hay más que ver las visitas de ministros del gobierno y consejeros de la Junta para tratar de vendernos lo bien que lo hacen. Solo que a veces resulta hiriente porque es un discurso repetitivo, siempre lo mismo. Esta semana, desde la administración central además del Cetedex, que lo único que queremos es que lo empiecen porque se ponen muy cansinos y lo entiendo porque es lo único que pueden exhibir como trofeo en años, porque en esto sí que hemos sido un páramo, en inversiones y en trato donde realmente tiene que verse el compromiso, los Presupuestos Generales del Estado, y les recuerdo que hemos sido los últimos, con 69 millones, una miseria, una indignidad. Pero bueno, de nuevo aparece y dicen que ahora sí, el Centro de Competencias Digitales de Linares, al fin la nueva Comisaría de Policía en la capital, etc. Por su parte la Junta envía a su consejero de Presidencia, el ínclito Antonio Sanz con el mensaje de la ITI, de la que dicen se han movilizado 169 millones en la provincia, ya van sustituyendo las palabras, lo que antes era inversión ahora es movilización.
PSOE y PP hacen sus campañas en base a la política institucional, sin escrúpulos, a pecho descubierto, aunque se trata de proyectos que nos recuerdan casi todas las semanas, para que no se nos olviden. En Jaén capital los dos alcaldes, como veo que algunos internautas consideran a Millán y Reyes, van a una, saben lo que se juegan y el presidente de la Diputación se desgañita valorando la gestión de Millán, dos por uno. Por cierto, Julio Millán sigue con su golpe de suerte, sobre todo últimamente a cada paso se le aparece la Virgen, la iniciativa de un empresario local para abrir, 17 años después de su cierre por una torpe decisión municipal, el hotel Rey Fernando, es un notición, una muy agradable sorpresa, y la opinión pública la ha recibido con entusiasmo. No hay trampa ni cartón porque es una responsabilidad empresarial y la voluntad del Ayuntamiento con la cesión. Al fin una salida para un rincón de pena aunque situado en la milla de oro de Jaén. Me alegro porque he sido perseverante, lo he denunciado en estos años docenas de veces, cada vez que pasaba por el lugar, y lo hago con frecuencia, sentía rabia e indignación por haberse permitido este paisaje tan desolador.
A Francisco Reyes le ha salido de natural esta semana un rasgo de crítica y supongo que también de autocrítica, ha dicho que la ITI ha sido una desilusión, algo que vengo denunciando desde el minuto uno, pero me parece que mira con dirección a Sevilla cuando el incumplimiento, el ninguneo, el descaro, lo ha perpetrado mayormente el gobierno de Sánchez. Además me cuesta creer que saquen tanto pecho con un instrumento, la ITI, que son fondos europeos para zonas necesitadas, simple beneficencia política, es tanto como reconocer la derrota de las administraciones a las que representan, pero los políticos son así, hacen de la necesidad virtud. También a Reyes le he querido entender la aceptación del fracaso con la letanía continua del ferrocarril que se nos resiste históricamente, de hecho vamos para atrás en vez de hacia adelante. Ni tres horas, ni ha funcionado la genial idea de viajar a Madrid vía Córdoba, que se le debió ocurrir a un iluminado. A este respecto siempre me acuerdo de un hecho verdaderamente formidable, el discurso del escritor extremeño Luis Landero el día que recibió la Medalla de Extremadura y no tuvo el menor inconveniente en poner colorados a los políticos, los de Madrid y los de su tierra. Les dijo: “Es una burla, una más en la historia de esta tierra, iréis al infierno por no haber traído el tren que esta tierra se merece. No hablo de un AVE, solo digo un tren digno”.
Este creo que es el papel de los intelectuales, no ponerse de perfil y por supuesto alejarse del viejo refrán de no morder la mano de quien te dio de comer en algún momento. Para mayor abundamiento es que hay políticos que insultan nuestra inteligencia, como el senador del PSOE, José Latorre, que trata de convencernos de que “siempre que hay gobiernos socialistas en España, le ha ido bien al ferrocarril en Jaén”. Con esta clase política, así nos va. Pues no, ni con el PSOE ni con el PP ni con nadie de los que en algún momento han estado cerca. El ferrocarril de Jaén es una vergüenza y los parlamentarios por esta provincia de muchos años para acá mejor se callen y se confiesen o hagan un acto de contricción. Hoy mismo el senador popular y exalcalde de Jaén, Javier Márquez, ha pedido en la Cámara Alta que el Gobierno destine inversiones en los PGE para que el AVE llegue a Jaén. Y esta ha sido la respuesta: el PSOE ha sido el único que ha votado en contra. Se han abstenido ERC, PNV, Junts, Bildu y PRC, entre otros, en tanto que han mostrado su apoyo, aunque ha sido insuficiente, Vox, Ciudadanos, Coalición Canaria, UPN, Geroa Bai, Més per Mallorca y Compromís. Así se escribe la historia, todos quedan muy bien retratados.
Pues en esas estamos y los partidos cerrando listas, unos con más dificultades que otros, unos gozando de todos los privilegios y otros padeciendo presiones a posibles candidatos de alguna lista molesta, algo que pone en evidencia lo peor de la política, y que me recuerda la frase de Séneca a Nerón: “Tu poder radica en mi miedo; ya no tengo miedo, tú ya no tienes poder”.
¿La manifestación pasada contra el diagnóstico de la sanidad pública? Les soy sincero, un pinchazo en toda regla, y eso que los partidos a la izquierda, sobre todo el PSOE, planteó una movilización importante, pero no sé si fue el buen tiempo o que estamos en crisis de compromiso, me inclino por esto último. Los populares desde la Junta y desde el partido han criticado el fervor socialista, con la presencia en Jaén de Juan Espadas, ni con esas, pero en política donde las dan las toman, en su día el PP fue también radical con la sanidad, y se entiende, en tiempos de Susana Díaz, la de la joya de la corona. Y hago este comentario porque hay razones objetivas para la denuncia y para salir a la calle, estamos hablando de la salud, un asunto crucial, y si no reaccionamos en algo que nos afecta tan directamente, ¿en qué lo haremos? Observo a mi alrededor y hay veces que siento que Jaén se sigue resistiendo a abandonar su histórica indolencia que es un regalo a los poderes, donde quiera que estén, y no me gusta esa sempiterna resignación.
La Diputación acaba de entregar el primer título de Hijo Adoptivo a título póstumo al que fuera presidente de Caja Rural de Jaén, José Luis García-Lomas, a quien siempre llamo porque eso fue, el gran mecenas de Jaén, a tal señor tal honor. El siguiente tributo, con el mismo reconocimiento va a ser para Miguel Hernández, del que ayer se cumplieron 81 años de su muerte y está vivo en nuestra memoria y aquí radica su obra y nos sentimos identificados plenamente con la letra de su poema Aceituneros que es además el mejor himno que podíamos tener. Para terminar nada mejor que hacerlo con una frase del poeta del pueblo en la que nos anima a ser combativos y a luchar con bravura: “Quien se para a llorar, quien se lamenta contra la piedra hostil del desaliento, quien se pone a otra cosa que no sea el combate, no será un vencedor, será un vencido lento”. ¿Qué, tomamos nota?
Foto: La imagen está tomada hoy mismo, en el abandonado rincón en el que se encontraba el Hotel Rey Fernando, cerrado hace 17 años por una torpe decisión municipal. Un empresario de Jaén está dispuesto a explotarlo y a dar vida a la céntrica plaza.