«Camina lento, no te apresures, que a donde tienes que llegar es a ti mismo»

BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / «Que cada uno barra delante de su propia puerta, y todo el mundo estará limpio”. (Goethe). Casi doscientos años antes del coronavirus el escritor alemán tuvo algunos consejos metafóricos para que hagamos nuestra parte en esta pandemia. En efecto, se trata de que la principal responsabilidad es individual, persona a persona, y es lo que debemos tener cuenta ahora, cuando de la noche a la mañana tratamos de pasar del todo a la nada. Otra frase nos la presta Aristóteles: “Es durante nuestros momentos más oscuros cuando tenemos que centrarnos para ver la luz”…Un placer dar la palabra a Federico García Lorca: «Nuestro ideal no llega a las estrellas, es sereno, sencillo; quisiéramos hacer miel, como abejas, o tener dulce voz o fuerte grito, o fácil caminar sobre las hierbas o senos donde mamen nuestros hijos”. El poeta más grande del siglo XX escribe en 1920 al pintor jienense Manuel Ángeles Ortiz este bello texto en el que, a pesar de soñar con lo más sencillo, confiesa tener “la amargura solitaria de no saber mi fin ni mi destino”. Dice más, con un halo de melancolía: “mi corazón ve su ideal lejano”. Y es que como diría Víctor Hugo “uno vive por la realidad; uno existe por el ideal”. ¿Cuál es la diferencia? Los animales viven; el hombre existe”…Además un día como hoy nacieron tres personajes literarios de postín. En 1860 el novelista y dramaturgo escocés James Matthew Barrie, creador del mítico personaje de Peter Pan, el niño que no quería crecer. El escritor George Bernard Shaw opinó sobre esta obra: “Ostensiblemente un entretenimiento vacacional para niños, pero en realidad una obra para adultos”. Dos frases conocidas de Mattehw Barrie: “No soy lo suficientemente joven como para saberlo todo” y “Nunca digas adiós, porque adiós significa irse lejos, e irse lejos significa olvidar”…En 1883 nacía el profesor y filósofo José Ortega y Gasset, considerado uno de los mejores ensayistas de la Generación del 14. Ejerció una gran influencia en la filosofía española y en la iberoamericana del siglo XX, no solo por su temática, sino también por su estilo literario ágil. ‘Filosofía’ en Ortega se encuentra unida a la palabra ‘circunstancia’ que él hace famosa en su expresión: “Yo soy yo y mi circunstancia, y si no le salvo a ella no me salvo yo”, de sus Meditaciones del Quijote. Llamado también el filósofo de la razón vital, fue un autor prolífico con obras tan conocidas como La rebelión de las masas, donde defiende que “la historia, el progreso, se llevan a cabo por el trabajo de las minorías”. Suyas son estas frases escogidas para la ocasión: “Solo cabe progresar cuando se piensa en grande; solo es posible avanzar cuando se mira lejos”, “Camina lento, no te apresures, que a donde tienes que llegar es a ti mismo” y “No sabemos lo que nos pasa y eso es precisamente lo que nos pasa”…No nos olvidamos de otro personaje destacado, el poeta y crítico literario asturiano Carlos Bousoño, nacido el 9 mayo de 1923. Su obra poética es abundante y desde Subida al amor hasta Primavera de la muerte está plagada de premios y reconocimientos, entre ellos el Princesa de Asturias de las Letras y el Premio Nacional de las Letras Españolas. Bousoño nos dejó en 2015 a la edad de 92 años. Nos queda sobre todo su poesía, como en este fragmento de Subida al amor: “Baja la luz de amor, la luz de vida/lenta en los aires minuciosos siento./Fundada luz de Dios con luz del alma./Qué claridad de pronto. Qué silencio”. También nos dejó escrita esta visión sobre la vida: “La vida es una historia muy bella que siempre termina mal”…Todavía podemos rescatar al poeta, dramaturgo y filósofo alemán Friedrich Schiller, fallecido el 9 de mayo de 1805, considerado junto a Goethe el dramaturgo más importante de Alemania. Sus baladas se encuentran entre los poemas más famosos y su Oda a la alegría fue incorporada por Beethoven en su Novena Sinfonía. Le reconocemos en estos testimonios: “Una memoria ejercitada es guía más valiosa que el genio y la sensibilidad” y “Si quieres conocerte, observa la conducta de los demás. Si quieres comprender a los demás, mira en tu propio corazón”…Hoy se celebra el Día de Europa, que conmemora la histórica declaración de Schuman en 1950, que fue el comienzo de lo que es hoy la Unión Europea, que provoca por igual adhesiones y rechazos, yo mismo me considero euroescéptico, lo confieso, porque a veces no está cuando las circunstancias la necesitan. Una valoración positiva viene de la mano de la excanciller alemana Angela Merkel: “Europa, con su democracia, sus derechos humanos, sus ideales y sus valores, tiene mucho que darle al mundo”. En el extremo contrario reflejamos la opinión del profesor José Luis Sampedro, que lo resume así: “Europa es como un jefe que nunca se pone al teléfono”…La última cita de hoy es uno de esos mensajes para cambiar vidas que me apetece reproducir: “Sé suave. No dejes que el mundo te endurezca. No dejes que el dolor te haga odiar. No dejes que la amargura te robe la dulzura. Aunque el resto del mundo esté en desacuerdo, sigue creyendo que la tierra es un lugar maravilloso”…