Por ALMA MESA PIQUERAS / Mientras asistimos ensimismados a un capítulo más de juego de tronos en Génova, y se nos va la vida tras el conflicto entre Rusia y Ucrania, nada desdeñable por supuesto, y altamente deplorable, por cierto; en el consistorio de nuestra capital acaba de ocurrir una de las mayores cacicadas de nuestros mandatarios.
Es curioso escuchar a las gentes en los bares, analizando procesos bélicos, tanto en Génova como en Ucrania, con conocimientos matutinos leídos en la prensa que toque, y con el lenguaje adquirido a base de repetir lo oído.
Resulta más curioso aún, que nuestras preocupaciones como capitalinos jaeneros, traspasen la frontera de Despeñaperros, mientras en nuestro propio Ayuntamiento, asistimos en el pasado pleno, a una de las mayores y mejor tramada jugada política de un concejal de Personal, que se ha tomado la causa del personal, de forma muy personal, valga la redundancia.
Poco conocen los paisanos de la taberna, de lo que ésta recién aprobada Relación de Puestos de Trabajadores (RPT), supone en las arcas municipales. En nombre del ahorro, vivimos los despidos de personal de Onda Jaén, ahora ya, se ve que corren mejores tiempos económicos, y lo que se propone y ha sido votado a favor por mayoría en pleno, es la consolidación de puestos que cambian la naturaleza contractual inicial. Es decir, una persona que tiene actualmente un contrato como laboral temporal, caso este específico del propio concejal de personal, pasa a ser directamente, y sin proceso selectivo por oposición, funcionario de carrera. Todo esto, ocurre mientras trabajadores interinos, miran con estupefacción que su oportunidad de promoción interna, les vuelve a pasar de largo.
Siendo la RPT, una herramienta necesaria y eficaz para la correcta organización de personal, tanto a nivel funcional como económico, el PSOE de Jaén, la usa de forma torticera, para asegurarse puestos fijos, en un proceso cargado de posibles irregularidades, y con un informe de Secretaría e Intervención, que pone de manifiesto que lo que están haciendo no es ni necesario, ni ajustado al formato que esgrime una RPT.
Lo próximo, presumiblemente, si esta RPT no se recurre ante los tribunales (defectos de forma e irregularidades sobran para acudir a un tribunal), será crear jefaturas de negociados o servicios, donde los recién autonombrados funcionarios de carrera sin proceso selectivo, ocupen sus plazas por los siglos de los siglos.
Podríamos seguir analizando… La proclamada unanimidad por el señor Alberca, falsa, no existe. Al menos si no se entiende unanimidad como llamada telefónica al sindicato de casa para jugar al “Monopoly”. La más que recomendable abstención del concejal, dada su implicación directa en el proceso; se autoasigna una plaza sin opositar. El posible incumplimiento de la ley 20/2021 de 28 de diciembre, de estabilización de los funcionarios interinos como funcionarios de carrera, cambiando la naturaleza de los contratos. Y lo más flagrante, la conversión de un proceso de estabilización laboral por arte de birlibirloque, en un proceso de funcionalización.
Sigamos luchando los conflictos externos, se nos está quedando una administración preciosa.
Foto: ültimo pleno municipal en el que se ha aprobado la RPT.
