Referente de jaenerismo
A sus setenta y pico de años el gran José Villar Casanova, el querido y admirado maestro Pepe Vica, sigue al pie del cañón y esto es de agradecer para la legión de personas que le siguen desde hace tanto tiempo y han paladeado el fruto de su trabajo tan polifacético, pero siempre centrado en su principal referente, el jaenerismo. Nacido un 17 de mayo en un barrio típico del Jaén de siempre, hoy nos lo sigue recordando a través de su veterana sección en el diario JAÉN, “La brisa de la Alameda”, una de las ventanas de opinión más longevas de la prensa provincial, 27 años ya.
En efecto esa brisa es perfectamente reconocible porque en ella es fácil identificar el paisaje y el paisanaje de nuestra ciudad y también en gran medida de la provincia. Pepe Vica tiene en esta sección un doble mérito que ha sido su condición profesional de siempre, hace unos dibujos magníficos y unas caricaturas de escándalo, porque las clava, y tanto por ellas como por sus textos ha pasado más de medio Jaén y más o menos esa puede ser la medida de los habitantes de la ciudad que conserven algún trabajo del reconocido caricaturista que es autor de varios libros en los que está recogido lo mejor de su arte. Libros en los que aparecen cientos de personajes de nuestro entorno, famosos y otros que lo son menos, pero que casi siempre se identifican como jienenses que merecen salir en las páginas de un periódico, que es un altavoz de los grandes y de los pequeños acontecimientos y protagonistas cotidianos.
Como comentarista no hay tema relacionado con la ciudad, pero también con la actualidad nacional, que se le haya resistido. Los aborda con seriedad, no crean, pero las más de las veces como es natural, le saca el perfil más irónico y humorístico, y puedo asegurarles, que en cientos de ocasiones ha sido una de las primeras sonrisas obligadas del día, compartida, es verdad, con las inconfundibles viñetas de Juan Carlos Contreras, todo en el mismo diario. En cuanto a su faceta de periodista deportivo hay que subrayar su especial vinculación con la trayectoria del Real Jaén, al que ha seguido durante decenas de temporadas, se ha adentrado en su historia y sigue sintiendo pasión por estos colores. El histórico equipo blanco ha sido para el entrañable Vica como parte de su propia biografía, creo que se merece en justicia los máximos honores de la institución.
Para marcar una semblanza justa del personaje necesitaríamos mucho más espacio, para hablar de sus inicios en los recordados Tejidos Gangas, que fueron una institución comercial en Jaén. O de sus letras para el himno del donante de sangre, o su autoría del libreto de la zarzuela “Mar de plata”, con música del maestro Manuel Vílchez, que por cierto le dedicó en su día una preciosa composición a modo de marcha titulada “El gran Vica”. Además, sus geniales “chilindrinas” cada feria de octubre, son el mejor exponente de una crítica política y social que no debe faltar en una sociedad sana. Por lo que ha sido y por lo que es, cuenta desde siempre con el afecto y el cariño de quienes le consideran un emblema de esta ciudad, como así lo vio el Ayuntamiento que lo tiene felizmente distinguido. Bien merecen reconocimiento esa pluma y ese lápiz que llevan tantos años haciendo las mejores radiografías locales, con especial predilección por las buenas gentes de Jaén, que son, como Pepe Vica, el mejor patrimonio de esta ciudad. En fin, si hubiera carnés de jaenero, con toda seguridad tendría uno de los primeros números. ¿Se puede decir más?
