A MINISTRO POR SEMANA. Esa parece que es por el momento la hoja de ruta del Gobierno de la nación para tratar de “compensarnos” por el agravio del Colce, de cuyas últimas novedades ya les puse ayer al día. El ministro de jornada ha sido hoy el de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, que, cómo no, ha posado con sus acompañantes en la Plaza de Santa María, ante la Catedral, que es nuestro photocall oficial, si recurrimos al último cuarto de siglo de la historia de Jaén tendríamos por lo menos el testimonio gráfico de todos los personajes, es decir, quienes en una mayoría han venido a Jaén a retratarse y a engañarnos con falsas promesas, salvo las excepciones que confirmarían la regla, utilizando a placer esa palabra tan manida, “compromiso”, que hoy también ha puesto en su boca el ministro de Cultura.
Aparte de la Catedral, donde sí es verdad que se realizan las obras de restauración de cubiertas, gracias a las aportaciones del Gobierno fijadas en presupuestos, que es la única administración que se retrata en este sentido, y lo han hecho tanto las del PP como del PSOE, el interés estaba centrado en ver si se prevé una salida inmediata para convertir el Museo Íbero en un espacio de verdad con su exposición permanente y definitiva. Se ha reunido con la consejera de Cultura de la Junta, Patricia del Pozo y ambos se han lanzado mensajes recíprocos de colaboración y de lealtad, pero el ministro ha sido incapaz de fijar una fecha, ni siquiera aproximada, para integrar este Museo jienense en la red estatal. Aparte de señalar, como antes indico, lo de “estamos muy comprometidos” ha declarado como aviso a navegantes y para hacer una llamada a la paciencia: “Hay que dar pasos para tener un espacio con las características, personalidad y fortalezas de un museo nacional”. O internacional, ha sugerido eufórico, en un momento determinado, “que merece Jaén”. Eso sí, nos han anunciado una nueva exposición temporal, qué remedio, mientras “se mantiene vivo el propósito de entrar en la red nacional”, ¿cuándo?, sine die, esto no lo ha dicho el señor Rodríguez Uribes, sino que es de mi cosecha, pura conclusión.
A todo esto recordemos que el edificio se inauguró en diciembre de 2017 después de unas interminables obras, en una gestión nefasta del gobierno de Susana Díaz, que por razones políticas exclusivamente se empecinó en abrir el Museo sin estar dotado de su contenido, y, más todavía, vinieron los Reyes de España a los que implicaron extrañamente en este acto de fe. La actual Junta, que se encontró con esta herencia, ha mantenido el ritmo, la consejera también es muy de “compromiso” y de “lealtad”, pero lleva desde que se hizo cargo de su responsabilidad, y hace más de dos años, con el mismo discurso. Estos políticos son muy previsibles, antes de que vengan ya sabemos a ciencia cierta que no nos van a sorprender.
Y, por cierto, a los responsables de las visitas ministeriales, se les debería aconsejar, por su propio bien, que si tienen que acudir a Jaén lo hagan con algunas concreciones. Hasta ahora el balance es poco satisfactorio, solo de imagen para ellos, pero con poca sustancia para la provincia. Primero fue la ministra Reyes Maroto, que vino ‘in albis’; y le siguió el ínclito señor Ábalos, que aparte de hacer pronósticos sobre mejoras ferroviarias que están por ver, y que si llegan tengan la seguridad de que seré el primero en reconocer, tuvo el gesto poco entendible, dejémoslo ahí, de que para dar una “alegría” a Jaén por la pérdida de la base logística del Colce, no se le ocurrió otra cosa que llegar a la capital con el tema estrella de anunciar un Centro de Competencias Digitales de Renfe, pero en Linares. Debe tener pésimos asesores, porque parece poco probable que esta visita se organizara desde Jaén, ya que entonces sería mucho peor.
ECHARSE A LA CALLE.-Viendo estos días en mis archivos y en internet las crónicas de la transición que escribí para el diario El País, como su corresponsal en Jaén en sus primeros años, me he encontrado con una iniciativa que puso en marcha en junio de 1979 el gobierno municipal presidido por Emilio Arroyo López, para informar a los vecinos de la entonces complicada situación económica encontrada en el Ayuntamiento y solicitar la colaboración ciudadana. Para ello el alcalde y sus concejales recorrieron la capital barrio a barrio. Qué raro, acudieron a todas las zonas de Jaén sin que fuera campaña electoral. Igual que hoy. Una buena iniciativa que se debería repetir de vez en cuando para que los habitantes de esta población se consideren protagonistas y no como a veces parece, simples paganos o convidados de piedra.
La información que publiqué en El País el día 24 de junio de 1979, decía textualmente en su párrafo principal: “Para incitar a los ciudadanos al pago de los impuestos, el alcalde de Jaén y miembros de la Corporación están visitando los distintos barrios de la ciudad. En las reuniones los vecinos plantean sus problemas y sugerencias a los miembros del Ayuntamiento. El alcalde expone en todos ellos la problemática general con que se ha encontrado el nuevo Ayuntamiento democrático y de una manera especial la delicada situación de la economía, puesto que se le debe al Ayuntamiento más de doscientos millones de pesetas por distintos conceptos impositivos”. Ha pasado de esto casi 42 años, pero bien se podría repetir la experiencia, aunque solo sea para ver la cara de la gente y tener una encuesta directa de lo que piensan los jienenses. Es más, deberían hacerlo en compañía de las asociaciones de vecinos, por cierto muchas de ellas en horas bastante bajas por falta de medios, porque el Ayuntamiento no les paga, y de atención, para darles a ellas el protagonismo que merecen.
Me ha venido al recuerdo este hecho al conocer que la concejal de Promoción Económica y segunda teniente de alcalde, María Cantos, y el concejal de Empleo, Francisco Díaz, han estado en un pueblo de Valencia en una jornada sobre fondos europeos Next Generation, con el objetivo de implantar en Jaén una oficina de captación de fondos. Un Ayuntamiento no se puede rendir y los concejales y concejalas responsables de áreas deben salir todo lo que puedan de los despachos, hay que ir en busca de recursos y no esperar a que vengan por sí solos.
LOS JUEVES DE LA CATEDRAL…Y MÚSICA. Se acaban de reanudar los “Jueves de la Catedral”, encomiable experiencia del Cabildo de la Catedral de Jaén con la colaboración desde hace varios años de la Fundación Caja Rural, que ejerce su mecenazgo sobre el primer templo diocesano. Este año, durante el actual mes de mayo, se hace protagonista al Obispo Don Alonso Suárez de la Fuente del Sauce (Ávila, 1450-Jaén, 1520), al cumplirse cinco siglos del fallecimiento del famoso obispo, que lo fue en vida por su labor pastoral durante veinte años, pero que ha pasado a la historia porque hasta hace bien poco ha sido el “obispo insepulto”, ha estado casi 400 años sin sepultura, todo ello por una enorme complejidad de problemas históricos con sus familiares respecto al lugar donde tendrían que reposar sus restos, y en los últimos dos siglos han permanecido en una cajonera de la Capilla Mayor de la Catedral, hasta que en 2001 el obispo García Aracil lo inhumó donde era su deseo tras manifestar que la situación creada durante siglos «hacía destacar a la Catedral de Jaén por un hecho verdaderamente exótico y no elegante», y así sucedía en realidad.
La primera conferencia, tan interesante como curiosa, en el hermoso Coro, ha estado a cargo del vicario general y deán catedralicio, Francisco Juan Martínez Rojas, con el tema “Don Alonso Suárez, un obispo prototipo de la reforma católica hispana”, a la que seguirán intervenciones de Pedro Galera Andreu, sobre “Alonso Suárez, el primer obispo constructor de la Edad Moderna en Jaén”; y Begoña Alonso Ruiz, de la Universidad de Cantabria, en torno a “Paisaje arquitectónico del obispo constructor y La Castilla de Suárez de la Fuente del Sauce (ya que también ejerció en Castilla). El ciclo se clausurará el 27 de mayo con música de la época. En esta ocasión se trata de Missa de Beata Vergine: los albores de la polifonía en la Catedral de Jaén, por La Danserye. En fin, una actividad de gran interés para un mejor conocimiento de esta joya y todo cuanto hay en ella.
Sobre el Obispo Insepulto se ha escrito mucho. Recuerdo un curioso libro del doctor Diego Jerez Justicia, que forma parte de su interés innato por determinadas hechos históricos y médicos, donde relata la ocasión en que doña Carmen Polo de Franco visitó la Catedral y le abrieron para su contemplación el arca con los restos de don Alonso Suárez. Le llamaron la atención sus manos, hasta el punto de que pasado el tiempo, ya más recientemente, cuando se anunció la exhumación, el doctor Jerez, fallecido hace unos años, pidió permiso al entonces obispo, don Santiago García Aracil, para realizar un estudio de la momia, con medidas, fotografías, etc., que le fue concedido, y que derivaron en su excelente trabajo sobre las consideraciones psicopaleopatológicas e históricas de un médico ante el cadáver momificado del prelado don Alonso.
Algo más quería señalar con respecto a la música en la Catedral, en los últimos años tan presente. Atrás quedó una etapa en blanco, la del obispo García Aracil, que se propuso, en contra de otras opiniones, preservar la Catedral de Jaén de actuaciones musicales, de modo que desde que se fue creo que la voluntad tanto del obispo don Ramón del Hoyo, primero y después don Amadeo Rodríguez, como por supuesto del deán Martínez Rojas, ha sido la de resarcirse de todas las manifestaciones culturales, y sobre todo musicales, que en una etapa estuvieron tan ausentes.
La Catedral se ha convertido en un escenario de referencia no solo para grandes exposiciones, del máximo nivel, casi todas o todas con el apoyo de la Fundación de la Caja Rural, justo es decirlo, pero no son menos los grandes conciertos que en este marco suenan a gloria, y se han sumado a nivel organizativo otras instituciones como la Universidad de Jaén.
Todo esto no es casual, la programación de calidad y la presencia en la seo jienense de tantos grupos y músicos de prestigio, creo que obedece a que el responsable de su Cabildo, Francisco Juan Martínez Rojas, es un reconocido melómano, entre otras muchas facetas. La realidad es que este tipo de actos hacen que se disfrute mucho más nuestra Catedral, que además de ser lo que es, el primer templo jienense, desde hace mucho tiempo, constituye un foco de atracción de la cultura en general y de la mejor música en particular.
Foto: Desde hace algunos años lo normal es que los ilustres visitantes a la capital pasen por el ‘photocall’ de la Catedral. Esas fotos son parte de la historia de la ciudad. Hoy ha sido el ministro de Cultura y Deporte, Joé Manuel Rodríguez Uribes.(CONSTRUCCIONES CALDERÓN).
