Llueve sobre mojado. El flamante presidente de la Audiencia Provincial, Rafael Morales, que ha tomado hoy posesión de su cargo ante el presidente del TSJA, el jienense Lorenzo del Río, también ha reivindicado la Ciudad de la Justicia. Su demanda se suma ya a la expresada en su día por sus antecesores en el cargo, Pío Aguirre primero y después Elena Arias-Salgado. También este clamor ha trascendido a varios decanos del Colegio de Abogados, pero da igual, la administración autonómica no se da por enterada, y pasan los años y sigue sin haber respuesta mientras en otras capitales ya se han inaugurado varias infraestructuras parecidas. En Jaén hay que esperar. Lleva un camino paralelo al de la Ciudad Sanitaria, que hoy ha vuelto al pleno del Ayuntamiento de la capital y se ha aprobado una moción, lo que pasa es que da igual, creo que no va a servir de mucho.
Nada nuevo bajo el sol, las instituciones gobernadas por socialistas y populares siguen el curso de su enfrentamiento, cuando aparece un rayo de luz y nos hace indicar que se ha acabado el conflicto, como cuando se ha dado un golpe de efecto en torno al tranvía, de pronto las aguas del desencuentro vuelven a su cauce. Junto a las declaraciones en la prensa, que es donde residen la mayoría de las polémicas, las mociones son muy socorridas para ayudarse en la estrategia, yo te doy por aquí y tú me devuelves por allá. Eso sí, con la aquiescencia de la estructura de los partidos, los palmeros siempre malmetiendo en una y otra dirección. Este es un mal ejemplo ante la celebración del Día de Andalucía, pero tampoco vamos a negar la evidencia.
Hoy, además, ha habido pleno del Ayuntamiento, con marcado carácter económico, porque se ha aprobado, con los votos de la oposición un nuevo adelanto por 15 millones de la Participación en los Ingresos del Estado (PIE) y un préstamo, con el aval estatal, por importe de algo más de 40 millones de euros. La oposición se enfada, y con razón en este caso, porque haya que acudir a los créditos para que la maquinaria municipal siga funcionando, pero no queda otra. Está claro que la situación no es la deseable y que desde el principio del mandato municipal se ha perdido tal vez un tiempo precioso en seguir una estrategia más pensada en resolver estructuralmente el problema en lugar de ir dilatando y colocando un parche detrás de otro.
Ha faltado voluntad, pero no ya en el equipo de gobierno solamente, recuerdo que al principio se anunciaban reuniones con la mejor voluntad para hacer aflorar algo parecido a un milagro, pero todo aquello fracasó porque el gobierno municipal se cansó o no pudo o supo sacarle mayor provecho. De todas maneras repito una vez más que me admiran las filigranas financieras que está haciendo el concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, que se ha ganado el respeto y el reconocimiento porque no ha resuelto el pozo en el que se encuentra el Consistorio, pero hay que reconocerle que ha mejorado la imagen y las expectativas del problema. Hace dos años la mayoría pensábamos que el Ayuntamiento cerraba, pero literal, y hoy, con todas las dificultades que se quieran, ahí sigue funcionando como en un ejercicio de funambulismo económico. La única verdad en la que la oposición acierta el tiro plenamente es que esta ciudad va a seguir endeudada durante mucho tiempo y que esto ya no es un tema de acto de fe en las personas o en los hechos, es en el lugar en el que estamos. Hay crisis para rato, las irresponsabilidades pasan una elevada factura y dejan algo más, una pesada losa que sufrirán los que vengan detrás de nosotros, por desgracia es así.
Otro asunto que ha sido polémico en el pleno de hoy, y lo entiendo en parte, es el de añadir a la Universidad Popular Municipal la denominación de “Alcalde Ramón Calatayud”. No voy a reiterar los argumentos que en su día ya esgrimí para explicar la que ha sido mi participación en este asunto, ceñida a escribir la carta para presentar las numerosas adhesiones recibidas desde muchas instancias locales. La oposición lo ha presentado en exclusiva como una especie de agresión a la Ley de la Memoria Histórica, en cambio otros tenemos opinión diferente, se trata de que a Ramón Calatayud se le quitó su nombre a un colegio de manera un tanto extraña, y era natural, si no existía mayor inconveniente, restituir su recuerdo en otro lugar, que podía ser una calle o cualquier espacio, aunque quienes tienen potestad para hacerlo pensaron que bien podía ser la Universidad Popular en reconocimiento a lo que el alcalde Calatayud hizo por la mejora de las infraestructuras educativas de la capital y porque se encuentra en la Avenida de Andalucía (Gran Eje), que fue un proyecto urbanístico que él gestionó.
Algunos de los que hemos intervenido puedo asegurar que en ningún momento hemos tenido en cuenta el momento histórico en que se produjo la etapa como regidor de Ramón Calatayud y mucho menos se ha tratado de violentar la Ley de la Memoria Histórica. Simplemente pienso que era un acto de justicia y todas las demás especulaciones carecen de sentido alguno. Me alegro por la familia que tiene un motivo de orgullo para celebrar. Igualmente me produce gran satisfacción que una parte de la calle Federico Mayor Zaragoza pase ahora a denominarse Honorato Morente Mejías, en recuerdo de un gran jienense y excelente amigo, merecedor de este reconocimiento. Espero que el Ayuntamiento siga siendo sensible y piense a la hora de conceder estos honores, menos en nombres sonoros y más en jienenses normales que han sido un ejemplo a seguir.
También es relevante que hoy se ha presentado en el Congreso el informe de fiscalización de cuentas de la gestión del tranvía de Jaén a cargo del presidente del Tribunal de Cuentas. PP, Cs y Podemos han sido duros con todo el proceso del sistema tranviario, en tanto que los socialistas lo han defendido como era de esperar. Lo más importante a mi juicio es que dicho Tribunal ha dejado claro que “no consta la existencia de antecedentes ni la realización de estudios previos” por parte de la Junta de Andalucía ni del Ayuntamiento, dirigidos a valorar la implantación en Jaén de este transporte. Vamos, que no había papeles, para que lo entendamos. En fin, qué decir…Por cierto que próximo a este mismo asunto, el Juzgado número 1 de Jaén ha señalado como investigada a la exalcaldesa Carmen Peñalver, por unas obras vinculadas al tranvía, concretamente no poder justificar el informe de la necesidad de las obras de la sede de la Policía Local. Veremos.
Dentro del ámbito municipal, acaba de surgir un nuevo episodio en las pésimas relaciones Junta-Ayuntamiento, la paralización de las obras en la calle Carrera de Jesús, so pretexto de protección cultural. Espero que este asunto se solucione lo antes posible porque tenemos la Semana Santa a la vuelta de la esquina y se nos puede presentar un grave problema. Por lo demás destacar los actos del I Festival de Piano que promueve la Diputación, que este año tira la casa por la ventana en el 60º aniversario de la creación del certamen. Por último, ante el Día de la Mujer es un mal ejemplo lo que acaba de suceder en Jaén, a una trabajadora de Salud Responde se le descuenta de la nómina el tiempo de ausencia justificada para interponer una denuncia por acoso. Salud Responde ya sabemos de quién depende. Menos palabras y más hechos.
