Por ANTONIO GARRDO/
CETEDEX. EL TIEMPO DIRÁ. Por aquí no estamos ni a favor ni en contra de nadie, únicamente en la defensa a ultranza de los intereses de Jaén y por tanto de cualquier iniciativa que trate de engrandecerla. Ayer se cumplieron dos años (10 de febrero de 2023) de la visita de la ministra de Defensa, Margarita Robles, para la firma del convenio de cesión por el Ayuntamiento de terrenos con destino al Centro Tecnológico de Desarrollo y Experimentación (Cetedex Jaén). Coincidente además con la creación de una Cátedra en la Universidad de Jaén con Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España. Aquel día fue cuando los más descreídos, y eran o éramos legión, empezamos a creer que el proyecto, anunciado pocos meses antes a bombo y platillo, esta vez sí iba en serio. Bien es cierto que en este día que pasa a la historia lo es también porque Jaén y su sociedad ganaban una batalla a la política y a las administraciones, cuya deuda con el territorio no satisfacen ni mucho menos con esta infraestructura, a pesar de que las expectativas son optimistas. Lo cierto es que el Cetedex discurre con normalidad y ha adelantado a aquel sueño del Colce que nos hurtaron. El tiempo dirá cuál de los proyectos es verdaderamente transformador. El tiempo es el que quita y da razones.
CENTROS COMERCIALES. Hoy nos hemos enterado por medio de la publicación ‘Just Retail’, de algo que pensábamos había caído en el olvido, y es que el Grupo Mipelsa, con más de medio siglo de trayectoria y que tuvo como cabeza empresarial a un grande como lo fue el marteño Miguel Pérez Luque, se dispone a iniciar los trabajos para la construcción de un nuevo parque comercial en la capital, concretamente en terrenos aledaños con el Estadio de La Victoria, una infraestructura que se propone estar terminada a finales del presente año y que, según las estimaciones que se realizan en la información indicada, proyecta la creación de 76 puestos de trabajo directos y un centenar más indirectos. Se añade que está confirmada la presencia de una importante cadena de supermercados y diferentes tiendas representativas de otros tantos sectores, incluyéndose, asimismo, la restauración. Creo recordar que hace tiempo también se contemplaba en esta misma zona la construcción de un hotel del que nunca más se supo. Es curioso cómo ha prendido en la capital la fiebre de los centros comerciales, a pesar de que los resultados no son espectaculares.
En este momento el que sí está en plena actividad es el Jaén Plaza, del grupo almeriense Alvores, que decididamente es por ahora el único en acción ya que La Loma fue languideciendo lentamente y hoy cuenta con el hipermercado de Carrefour y un número muy reducido de tiendas y un negocio de restauración, además de los cines, aunque también se ha rebajado notablemente la presencia de espectadores tras la apertura reciente de los cines Yelmo. Lo dicho, Jaén Plaza se afianza como centro comercial de referencia y está por ver si la nueva propiedad es capaz de darle vida a La Loma, que se inauguró en mayo de 1991 y se ha quedado obsoleto por falta de dinamismo y de saber imprimirle actividad, un caso raro porque desde hace años se veía venir la nueva construcción, es decir, no era ninguna sorpresa, y sin embargo no se produjo ninguna reacción para renovarlo, por el contrario se fue dejando apagarse poco a poco, desapareciendo tiendas y además con la crítica generalizada de que los precios de los alquileres eran altos en comparación con los servicios ofrecidos.
Es una pena porque durante muchos años su éxito fue indudable, hasta que la gestión empezó a decaer. Todavía queda un hilo de esperanza, ya que hace unos meses, durante el verano, se anunció que la firma Onix Capital Parteners, un fondo de inversión argentino, había procedido a la compra a su anterior propietario Klépierre. El nuevo dueño es una potente firma privada de gestión de inversiones inmobiliarias, y en sus primeras reacciones los directivos parecían dispuestos a invertir en su puesta al día, de hecho se anunciaron 15 millones para ello, pero por el momento no se ha producido cambio alguno, sigue tan desolado. ¿Lo veremos pronto seguir funcionando como centro comercial y parecido a como ha estado durante tantos años o los nuevos dueños proyectarán un cambio de rumbo? ¿No son más centros comerciales de los necesarios para una ciudad y área de influencia metropolitana de las características de Jaén? Por otra parte entiendo que los grupos empresariales deben tener datos, no se entiende que se tiren a la piscina sin un previo estudio de mercado. Pero no queda ahí la cosa, últimamente mueve los hilos la sociedad que pretendía construir otro centro comercial junto a las cocheras del tranvía, en Vaciacostales, era Hacienda Las Cuevas, y su propuesta es incluso anterior a la llegada de Alvores, pero problemas de todo tipo, especialmente urbanísticos, frenaron un proyecto que no se sabe si seguirá teniendo voluntad de intentarlo. Una movilización en torno a los centros comerciales que está en paralelo con escasas actuaciones desde las administraciones, especialmente el Ayuntamiento, para facilitar la actividad del comercio de siempre, al que continuamente se le dedican halagos pero a la hora de la verdad se les dispensa escasa atención, es normal encontrarse establecimientos cerrados, por la imposibilidad de soportar los precios de los alquileres, aunque es también cierto que van naciendo proyectos con el objetivo de abrirse camino en la actividad comercial. De todo hay en la viña del Señor, pero el comercio de toda la vida necesita más apoyo, y al menos la misma alfombra roja que los gobernantes les dedican a los poderosos.
RECAUDACIÓN MUNICIPAL. En el ámbito municipal ha surgido en los últimos días la polémica en torno al Servicio de Recaudación. El gobierno local formado por PSOE y Jaén Merece Más ha dispuesto ceder el cobro de las tasas e impuestos a la Diputación Provincial, como de hecho lo tienen establecido la inmensa mayoría de los ayuntamientos, a excepción de Jaén donde en los periodos de gobierno del PP, simple y llanamente por los intereses políticos, esto no ocurre. Los populares y su portavoz, Agustín González, han alertado no ya de que se va a perder dinero puesto que la Recaudación Municipal es muy efectiva, sino que ha puesto el grito en el cielo porque también se pueden ver negativamente afectados los empleados municipales de este servicio. Hay que distinguir entre dos acciones, una es la de encargar a Diputación el cobro, porque se supone que reportará beneficios para el Ayuntamiento, a pesar de que el PP lo niegue. Asunto distinto es que hay que impedir a toda costa que la operación derive en entreguismo, por lo que es necesario asegurar que la adscripción de los empleados al organismo supramunicipal se haga con todas las garantías y manteniendo sus puestos de trabajo sin el menor riesgo. El equipo de gobierno ha respondido pidiendo tranquilidad, pero a mi modo de ver no se ha explicado a la opinión pública, e ignoro a los propios afectados, el capítulo de pros y contras, si es que las hay.
Creo que es bueno relacionarse entre administraciones próximas, aunque los políticos tengan que hablarse, pero no se pueden defender situaciones caprichosas. Por cierto, ¿qué haría el PP en el caso de que este mismo partido gobernara la Diputación?, ¿actuaría con la misma indignación y malestar? Hay que ponderar y no calentarse, que falta mucho tiempo aún para que acabe el mandato y hay que llegar a la meta, además de hacerlo con energía y con salud. También he visto la denuncia de los populares sobre el cierre los sábados por la tarde de la Oficina de Turismo. Llueve sobre mojado, ya ocurrió cuando gobernaron los anteriores, el caso es que no es de recibo que estemos clamando por la llegada de turismo a Jaén, que transmitamos cada dos por tres la alegría que nos produce el crecimiento de nuestra oferta, y a la hora de la verdad caigamos tantas veces en “haz lo que yo diga, pero no lo que yo haga”. La Oficina de Turismo, pero también todos los recursos públicos, deben estar abiertos los días de afluencia turística, y los fines de semana lo son. Negocien con la Junta, que ya tiene firmados sus convenios con Úbeda y Baeza, hagan lo que tengan que hacer, pero si un turista llega al local de referencia y se lo encuentra cerrado, menuda imagen se lleva de la ciudad. Esto es que no admite mayor debate, solo actuar.
PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD. Finalmente me quedo con la interesante y simpática entrevista que el excelente equipo de Cucha Qué podcast le hace el catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Jaén, Pedro Galera, y me quedo con la pregunta de si la Catedral llegará algún día a ser Patrimonio de la Humanidad, tras las exigencias que plantea la Unesco. El profesor Galera, que es un lujo de Jaén, señala que “entusiasmo no ha faltado” en este empeño, a pesar de que el objetivo se viene persiguiendo desde hace ya más de veinte años, pero reconoce, como es la impresión general, que la seo jienense tiene motivos más que sobrados para recibir el citado reconocimiento. Ahora bien, por lo que se refiere al entorno, que es fundamental para la declaración, y no hay más que visitar la parte monumental de Baeza o la Plaza de Vázquez de Molina de Úbeda, y sus respectivos alrededores, el organismo que decide, y lo explica muy bien Galera, no se ciñe solamente al entorno, la Plaza de Santa María y poco más, que por cierto a pesar de que ha habido algunas actuaciones en los últimos años, no se encuentran en perfecto estado de revista, sino que la exigencia va más allá, y se ve afectado el propio casco histórico, que forma parte de la ruta patrimonial y monumental. Pedro Galera es prudente, pero se le entiende. En resumidas cuentas, es indiscutible que la Catedral de Jaén lo merece, de la misma manera que es meridianamente claro que, visto lo visto, la ciudad de Jaén no ha hecho sus deberes. No tengo forma de expresarlo con mayor claridad.