Distinguida consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, doña Rosa Aguilar:
Empezaré confesando que como ciudadano me ha provocado una enorme decepción en esta actual etapa suya como consejera de un área tan importante como es la Cultura, en el gobierno de la comunidad autónoma andaluza. Más si cabe porque en otros cometidos que ha desempeñado en su ya dilatada trayectoria política me pareció siempre una persona razonable, con discurso y empática. No me podía imaginar que con su llegada de nuevo a la Junta pudiera cambiar su actitud anterior, al menos en lo que más conozco, su relación con la provincia de Jaén. Es imposible entender que las poquísimas veces que ha pasado por aquí haya sido para atender compromisos de empresas privadas, legítimos por supuesto, pero no la hemos visto participar en actividades públicas, en visita oficial con un programa de contenido y dando respuesta a los proyectos, las necesidades y las inquietudes de esta capital y de su provincia.
Recorre con frecuencia Andalucía, por lo que observo por los medios de comunicación, mima especialmente a algunas capitales de nuestro territorio, pero lamentablemente le falta tiempo para venirse por Jaén de vez en cuando. Creo que la presidenta, Susana Díaz, debería obligarles a los consejeros y consejeras a pasarse por las distintas provincias al menos una vez cada trimestre. En ese caso usted nos debería muchísimas visitas, todas las que no ha hecho en estos años.
Y no es por verle la cara, señora Aguilar, es porque los jienenses tenemos derecho a que el gobierno de nuestra comunidad autónoma nos trate en condiciones de igualdad al resto de territorios. Supongo que conocerá usted cuál es el sentimiento jienense respecto del escaso compromiso político e inversor del gobierno andaluz para con Jaén, porque al menos le llegará este malestar que ya es histórico. No es usted tampoco la única responsable de una Consejería que obvia olímpicamente a Jaén, lo que sí es usted es la cabeza visible de una Consejería con la que esta ciudad y esta provincia tienen que relacionarse mucho porque afortunadamente para nosotros brilla la Cultura y más que podría ser si ustedes se ocuparan como es debido de las parcelas que tienen que atender. Le diré de paso que menos mal que ha dado con una buena delegada territorial, Pilar Salazar, que me parece una persona competente y que le guarda bien las espaldas, pues de lo contrario tendríamos que haber ido miles de jienenses a manifestarnos delante de su Consejería para llamar su atención.
Señora Aguilar, no ha venido a disfrutar con los jienenses del Museo Íbero, que aunque han pasado muchos años, parece que ya ha llegado la hora de abrirlo al público, si bien no contábamos con un nuevo e imprevisto retraso, que, a la vista de todos los acontecimientos, de sus ausencias y de sus silencios, todo hace indicar que se puede prolongar. Ya no nos extrañaría. La hemos visto pasearse por otros museos andaluces y anunciar mejoras a bombo y platillo, pero Jaén le queda demasiado lejos al menos para su agenda. Tal vez sienta algo de pudor de encontrarse con las vías del sistema tranviario, en el que también usted participó al frente de otro departamento. Lo peor de todo es que el Museo Íbero, obra de su Consejería, era el proyecto estrella de los presupuestos de la Junta para 2016 y 2017, eso y el Centro de Salud de Expansión Norte, que esto pertenece a otro departamento. Pero en dos años ni lo uno ni lo otro, y en ambos casos hemos perdido la cuenta del origen de las obras. Y usted se va de rositas, valga la expresión, sin dar ninguna explicación, como no viene se ahorra las explicaciones y los posibles disgustos.
Pero si lo del Museo Íbero es de traca, en el sentido de que no damos crédito a que una consejera de Cultura no haya venido a compartir con las autoridades y la sociedad de Jaén la buena nueva, aunque se esté haciendo tanto de esperar, no tengo palabras para calificar la indiferencia y la falta de sensibilidad que ha demostrado con respecto a los importantísimos yacimientos arqueológicos de Jaén. A todo el mundo relacionado con la Cultura ha puesto en pie el reciente reportaje de National Geographic, donde el documental de James Cameron apuntaba a Marroquíes Bajos como posible escenario de la Atlántida de Platón, y usted sin dar señales de vida, bien que nos hubiera gustado que nuestra consejera se “bañara” en la autoestima que algunas de estas noticias, parte leyenda y parte realidad, han supuesto para esta capital, porque lo que sí es cierto es que en esta zona jienense se asentaba una gran ciudad del calcolítico, y han producido un gran efecto en la opinión pública, lo que no han conseguido es traerla a usted hasta Jaén y hacer paisanaje. Esto también es para tenérselo en cuenta.
En fin, no se trata de ser exhaustivos porque la lista de olvidos, de afrentas, de desprecio político, no se pueden relacionar en un artículo de opinión. Pero no ha tenido el gesto de asistir a alguna de las ediciones del Premio Jaén de Piano, no se ha sentado a hablar con los grupos que están surgiendo en la ciudad con iniciativas culturales dignas de ser tenidas en cuenta, no se ha avanzado en compromisos relacionados con la apertura de edificios del patrimonio en manos de la Junta, se ha echado en falta su ausencia en los museos jienenses, en el Archivo Histórico, en alguna Feria del Libro, en los recursos culturales que jalonan la geografía jienense…no hablemos de la Catedral y de la ilusión de ver convertido en realidad el sueño de ser declarada Patrimonio de la Humanidad, en la que no se ha conocido su implicación y su apoyo de manera permanente, una actitud incomprensible y muy difícil de entender por la ciudadanía; en fin, usted estará cumpliendo con otras provincias, no lo sé, pero en el caso de Jaén es una realidad incontestable que su nivel de atención lo mantiene desde la distancia, es de suponer, pero si un día, con la llegada de la democracia, cambiamos el centralismo por la autonomía para tener el gobierno más cerca, en su caso y en el de otros ilustres compañeros y compañeras suyos, al menos en lo que respecta a Jaén, no ha servido para mucho.
Señora consejera, no sabe lo que se ha perdido porque en Jaén todo es fácil, la gente se da con facilidad y los políticos pueden vender sin grandes esfuerzos su mercancía. En su caso ha preferido ignorarnos, a costa de que la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, es decir, algo que legítimamente nos pertenece, y a la que usted representa, haya perdido para muchos jienenses crédito y confianza, porque ni viene ni cumple. Aunque, pese a usted, Jaén existe.
Con mis atentos saludos.
Foto: Rosa Aguilar, consejera de Cultura de la Junta de Andalucía.
