Por ANTONIO GARRIDO RUIZ | La oportunidad era de oro y el Real Jaén por fin la aprovechó. El pinchazo del Juventud Torremolinos ante el Poli Almería daba mucha más importancia a la cita del conjunto lagarto ante el Huétor Vega, séptimo clasificado de la categoría y que tenía los puestos de play-off a solo cinco puntos, pero que se vio superado por los pupilos de Emilio Fajardo en un encuentro que confirma la mejoría, sobre todo en cuanto a resultados del cuadro jiennense. Porque en el juego, el Real Jaén, sigue sin convencer.
El encuentro arrancó con muchísimas cosas en juego, pero el ritmo de partido fue más bien plano durante la primera mitad. El Huétor Vega, juntito y a la expectativa. El Real Jaén acumuló mucho balón pero apenas amenazó al guardameta visitante. De hecho, el primer disparo a puerta del Real Jaén se hizo esperar hasta la media hora de partido, en las botas de Fernando, que inquietó con sus movimientos a la zaga granadina. Ambos equipos llegaron al descanso con los guardametas como espectadores de lujo, con los guantes intactos ante una primera mitad de poco fútbol para lo que había en juego.
Pero si un equipo tenía más que perder era el Real Jaén. Por eso los jiennenses comenzaron la segunda parte subiendo varias marchas. El Huétor Vega salvó hasta en dos ocasiones un gol cantado sobre la línea de Migue García. Pero el conjunto lagarto siguió intentándolo y finalmente Pablo de Castro aprovechó las dudas en el despeje de los zagueros granadinos tras un saque de esquina y fusiló la meta visitante para poner el primero en el marcador. Fajardo también aprovechó el momento de adelantarse en el luminoso para agitar al equipo. Entraron Joseliyo y Álvaro Muñiz con una idea clara: no perder balones, estar juntos y salir a la contra. El Real Jaén tiró de veteranía de la mano de los Javi Moyano, Espín y compañía, y supo bajar varias revoluciones a los visitantes a través de posesiones largas y un trabajo defensivo muy serio.
El Real Jaén tiró de oficio, contemporizó y echó el cerrojo a la portería ante las últimas acometidas del Huétor Vega. Finalmente, tres puntos de vital importancia para los jiennenses, que sin hacer ni mucho menos un partido brillante, ya ven más cerca al líder Juventud Torremolinos (solo seis puntos les separan). Quinta victoria consecutiva de los de Emilio Fajardo que, además, siguen sin conocer la derrota en Liga desde el pasado 23 de noviembre. El juego no es brillante pero los resultados ahí están. Y es que el Real Jaén se está transformando en un equipo oficioso, efectivo y que sabe sufrir. Señas de identidad que deberá mantener para tener opciones de alcanzar un liderato hoy un paso más cerca.