Hace unos días andando por el Gran Eje escuché casualmente cómo el reloj de la Iglesia de San Félix de Valois emitía una nota musical cuando el reloj dio las 12 horas de la mañana. Muy agradable el oírlo.
Lógicamente me vino a la mente el escrito mío publicado donde hablo del silencio del reloj de la Diputación.
Es chocante lo que sucede en esta ciudad, por lo que se ve no hay una norma igual para todos, sino que cada uno actúa a su libre albedrío.
Pregunto, ¿qué daño puede hacer el sonido de ese reloj tan bonito de la Diputación para silenciarlo? Admito que se silencie por la noche, pero dejenos, Sr. Presidente, que los ciudadanos jiennenses podamos disfrutar de esa linda melodía durante el día.
Ya tenemos bastante con las penurias y miserias que estamos padeciendo en esta ciudad.
Espero don Francisco que por una vez acceda usted a esta petición.
Muchas gracias.
Atte. José Andrés Lopez.