«La soledad se admira y desea cuando no se sufre»

BUENOS DÍAS. Por ANTONIO GARRIDO / “La soledad se admira y desea cuando no se sufre, pero la necesidad humana de compartir cosas es evidente” (Carmen Martín Gaite). Lleva razón la célebre novelista, bien sabemos que el problema de la soledad, como nos recuerdan con frecuencia las estadísticas, está más que presente en nuestra sociedad y también en nuestro entorno inmediato, la capital y la provincia de Jaén. Las personas que han hecho esta opción, por voluntad o por necesidad, demandan una atención especial de las administraciones que tienen estas competencias, no podemos olvidar que la mayoría poseen ya una edad avanzada y en algunos casos les acompaña alguna discapacidad. Aparte de lanzar un SOS para que la soledad no sea una tragedia, podemos concluir con la impresión generalizada que existe de que la soledad deseada se puede llegar a disfrutar, en tanto que en muchas ocasiones la impuesta se padece, se sufre. Y no hay nada peor que sentirse solo estando en compañía. Pues bien, la escritora salmantina Martín Gaite, está ligada a esta fecha, ya que nos dejó tal día como hoy del año 2000. Esta autora fue Premio Príncipe de Asturias de la Letras en 1988 y Premio Nacional de las Letras Españolas. Integrante de la llamada Generación del 50 o del Medio Siglo, sus narraciones se centraron en recuerdos de personajes femeninos. Obtuvo el Premio Nadal con su primera novela, Entre visillos, en la que refleja, empleando una técnica neorrealista, la anodina existencia de una serie de muchachas en el marco de una ciudad de provincias. Posteriormente se distanció de esta visión testimonial, propia de la época, con Ritmo lento, donde priman los aspectos introspectivos y de comunicación interpersonal. Retahílas, acaso su principal novela, supuso una profundización en esta problemática, a la que se añade una reflexión sobre el propio hecho narrativo. La recordamos en sus siguientes expresiones: “Si algo he aprendido en la vida es a no perder el tiempo intentando cambiar el modo de ser del prójimo”, “No te escudes en la edad, que es así como se envejece. La juventud es un estado de ánimo” y “Mientras dure la vida que no pare el cuento”… El día nos recuerda también a Salvador de Madariaga, nacido un 23 de julio de 1886. Este diplomático, escritor, historiador y político, fue ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes durante la Segunda República Española, en el cuarto gobierno Radical/Cedista. Suyas son estas frases: “El alma humana tiene más raíces y ramales de lo que parece” y “La conciencia no nos impide cometer pecados, pero desgraciadamente sí disfrutar de ellos”…Otro autor nacido tal día como hoy, de 1888, es el escritor estadounidense de novelas policíacas Raymond Chandler, creador del popular detective privado Philip Marlowe, y artífice fundamental de la llamada novela negra, que revolucionó la típica trama de intriga y misterio de la literatura policíaca reflejando la dureza de la vida urbana y la corrupción social. Suyos son estos testimonios: “El primer beso es mágico, el segundo íntimo, el tercero rutinario” y “Soy estrictamente del tipo de los que se quedan al fondo y mi carácter es una mezcla no llevadera de indiferencia exterior y arrogancia interior”…En el recorrido nos encontramos también con el escritor italiano Giuseppe Tomasi Di Lampedusa, autor de una única novela, El gatopardo, considerada por algunos entendidos como una de las mejores obras italianas del siglo XX. Está ambientada en la unificación italiana, y el gatopardismo, o el adjetivo lampedusiano ha pasado a definir el cinismo con el que los partidarios del antiguo régimen se amoldaron al triunfo inevitable de la revolución, usándolo en su propio beneficio; posición acuñada en una frase lapidaria: Que todo cambie, para que todo siga igual. Dos expresiones de este autor: “Halló refugio en la prudencia, la más dúctil y la de más fácil manejo de todas las virtudes cardinales” y “Si queremos que todo siga igual, es necesario que todo cambie”…Dos frases de Ángel María De Lera (fallecido el 23 de julio de 1984), novelista y Premio Planeta de 1967: “…es fácil hacer la crítica de la pasado a la vista de los resultados” y “El amor tiene que madurar para que no duela y amargue”…Me voy a permitir para finalizar, un recuerdo a un gran poeta nacido en Argentina, de padres emigrantes españoles, y que vivió en tierras de Jaén a partir del año 1979, nacido el 23 de julio de 1930 y fallecido en su retiro de Málaga en 2009. Me refiero al gran poeta José Viñals, que durante una etapa trabajó en el Instituto de Cultura de la Diputación Provincial, hombre creativo y cuya poesía era muy valorada. Conocí y traté a esta gran persona, Pepe Viñals, que inició su andadura con una preciosa obra poética, Entrevista con el pájaro, que le otorgó notoriedad. Para Viñals, que se hizo jienense de adopción, la poesía no estaba vinculada con la literatura, sino con el espíritu. En él, la espiritualidad surge de la observación profunda del mundo, de los detalles que le rodean y de su admiración y pasión por los pájaros. Esta frase le pertenece: “Tengo pasión por las brújulas, aunque no señalen el norte. Soy un perpetuo extraviado”. Siempre en el recuerdo…La última cita es de Jacinto Benavente: “¡Oh, la seriedad!. La ropa negra con que se va a todas partes”.